Corea del Norte se ha visto golpeada por su peor sequía en un siglo, afirmaron medios estatales, elevando los temores de otra inminente crisis alimenticia en el empobrecido país comunista.
La nación ha sufrido de prolongadas escaseces alimenticias desde una desastrosa hambruna a mediados de los ‘90 que se cree que mató a hasta 1 millón de personas.
La agricultura del país se mantiene en un estado frágil, influenciada fuertemente por las condiciones meteorológicas y un pobre manejo económico.
La sequía ha devastado la tierra agrícola en las provincias de Hwanghae and Pyongan, afirmó la Agencia Central de Noticias Coreana, mencionando que más de 30% de los arrozales del país se estaban secando.
“La peor sequía en 100 años continúa, causando un gran daño”, sostuvo la agencia.
“El nivel de agua de las reservas está en su mínimo, mientras que los ríos y arroyos se están secando”.
La semana pasada, el Ministerio de Unificación de Seúl estimó que la producción de cultivo podría caer hasta 20% este año si la sequía continúa hasta julio.
La lluvia caída tocó un mínimo en quince años el año pasado, 40% por debajo del promedio de lluvia entre 1981 y 2010, según el Ministerio.
El Programa Mundial de Alimentos, la agencia de las Naciones Unidas, está preparándose para enviar asistencia de emergencia si la situación se deteriora.
La ONU ha manifestado que la falta crónica de alimentos ha dejado a cerca de un tercio de los niños de Corea del Norte malnutridos, con dos tercios de la población sufriendo una “inseguridad alimenticia crónica”.