La aseguradora de salud británica Bupa acordó pagar una multa de 35 millones de dólares australianos (US$ 23 millones) en Australia tras admitir una conducta abusiva al rechazar reclamaciones legítimas de pacientes durante cinco años.
La Comisión Australiana de Competencia y Consumo, el organismo de control del consumidor del país, inició un proceso legal contra Bupa tras declarar que la compañía británica había incurrido en prácticas engañosas entre mayo de 2018 y agosto de 2023.
El regulador acordó la multa con Bupa, pero un tribunal determinará formalmente la sanción, que podría cambiar.
Esta medida es la última de una serie de acciones de los reguladores australianos contra empresas como Qantas, HSBC y los supermercados y bancos del país por la mala gobernanza y la protección del consumidor.
La demanda contra Bupa se relaciona con reclamaciones de "cobertura mixta" en las que los pacientes verificaban su elegibilidad o presentaban una solicitud que implicaba múltiples procedimientos, generalmente durante una visita al hospital.
Bupa rechazó dichas reclamaciones en su totalidad si uno de los procedimientos no estaba cubierto por la póliza del cliente, aunque otras partes de la reclamación fueran legítimas, según la ACCC.
Perjuicio a miles de asegurados
Gina Cass-Gottlieb, presidenta de la comisión, afirmó que las reclamaciones rechazadas llevaron a miles de clientes a pagar de su bolsillo, a mejorar sus pólizas o, en algunos casos, a interrumpir el tratamiento debido al costo.
“La conducta de Bupa afectó a miles de asegurados durante más de cinco años y perjudicó a los consumidores, algunos de los cuales retrasaron, cancelaron o no recibieron tratamientos que estaban cubiertos, al menos parcialmente, por sus pólizas de seguro médico”, declaró Cass-Gottlieb en un comunicado.
Nick Stone, director de Bupa Asia Pacífico, afirmó que la aseguradora había admitido la “conducta abusiva” y que, hasta la fecha, había pagado 14,3 millones de dólares australianos en indemnizaciones a los clientes para cubrir 4.100 reclamaciones y verificaciones de elegibilidad. “Esto nunca debería haber sucedido”, sentenció.
Bupa Asia Pacific, que abarca sus operaciones en Australia, Nueva Zelanda y Hong Kong, fue la unidad más grande de la aseguradora el año pasado, generando el 37% de los 16.900 millones de libras en ingresos del grupo y casi la mitad de sus 914 millones de libras en beneficios subyacentes.
La compañía británica entró en Australia en 2002 y ha adquirido competidores locales para convertirse en la segunda aseguradora de salud privada más grande de Australia, detrás de Medibank Private, con 4,5 millones de clientes.
El gobierno australiano subvenciona los seguros de salud privados para aliviar la presión sobre el sistema público, lo que impulsa las tasas de contratación.
Bupa también se ha expandido a la gestión de centros de atención y salud para personas mayores en Australia y se le ha vinculado con una posible oferta por el operador hospitalario Healthscope, que se declaró en concurso de acreedores el mes pasado. Bupa se ha negado a comentar si intentará adquirir la compañía.