El ministro de Hacienda de Brasil, Guido
Mantega, mejoró hoy sus previsiones de crecimiento de la economía
nacional para 2010 de 5% a 5,2% y sostuvo que este año podrán
ser creados 1,6 millones de nuevos empleos.
Mantega presentó las previsiones de su despacho en un consejo de
ministros encabezado por el presidente del país, Luiz Inácio Lula da
Silva, quien ya encara su último año de mandato, pues entregará el
poder el próximo 1 de enero al ganador de las elecciones de octubre.
Durante su intervención, el ministro de Hacienda insistió en que
Brasil ya ha superado totalmente los efectos de la crisis financiera
global y predijo que en 2010 el país ostentará "unas altas tasas de
inversión", pese a tratarse de un año electoral.
También previó que, durante 2010, la demanda interna crecerá un
7,3% y propiciará un aumento de la producción industrial cercano al
7%.
Mantega también reforzó su convicción de que el país está en
condiciones de soportar nuevas turbulencias por la "solidez de sus
fundamentos económicos" y por sus fuertes reservas internacionales,
que cifró actualmente en 241.000 millones de dólares.