La presión sobre las monedas emergentes no da señales de ceder. Con la Reserva Federal iniciando hoy sus dos días de reuniones, los capitales siguen abandonando en masa los mercados más riesgosos donde estuvieron estacionados por años buscando mayores retornos, a la espera de que el banco central de EEUU dé nuevas señales de que seguirá profundizando el retiro de estímulo, una política que está haciendo subir las tasas de interés en el mundo desarrollado.
El índice de Bloomberg de las 20 monedas emergentes más transadas cayó 1,2% la semana pasada, extendiendo su declive en el último año a 9,4%, su mayor retroceso desde 2008.
Impacto sistémico
Al ajuste en la política de la Fed se suman además señales de desaceleración en China y la devaluación del peso en Argentina, que revivió los temores de una crisis en la economía trasandina.
Y completando una tormenta perfecta para los mercados emergentes, las crisis políticas en Turquía, Ucrania y Tailandia han deteriorado aún más la confianza de los inversionistas. En Turquía, donde el gobierno afronta un escándalo de corrupción, la lira volvió a desplomarse a un mínimo histórico, lo que llevó al banco central a convocar para hoy a una reunión de emergencia. Los observadores esperan que la entidad eleve la tasa de referencia para contener la caída de la moneda, pese a las presiones del gobierno que se opone a la medida porque afectaría su meta de crecimiento. Tras el anuncio, de hecho, la moneda repuntó.
Mientras que el contagio de la devaluación en Argentina podría ser limitado debido a los menores flujos externos de capital, Citigroup cree que un contagio desde Turquía podría volverse sistémico.
Efecto contagio
Las amenazas en mercados específicos han arrastrado a otras divisas, como el rublo ruso, el peso mexicano, el real de Brasil y al peso en Chile. El rand sudafricano llegó a caer ayer 1,5% a mínimo desde octubre de 2008, en su cuarta jornada consecutiva de bajas, aunque recuperó terreno para cerrar con un declive de 0,3%.
“Argentina, Turquía y Sudáfrica llevaron a otros mercados a una fuerte caída en lo que tiene el potencial para convertirse en la corrección más complicada en los mercados emergentes desde 1998”, dijo a Bloomberg Michael Shaoul, presidente de Marketfield Asset Management.
El rublo ha caído 5,6% este mes, en su peor comienzo de año desde 2009, lo que amenaza los planes del gobierno de vender un tercio de su oferta de bonos para el año en el primer trimestre, y la autoridad ahora está evaluando suspender las operaciones.
La moneda rusa anotó ayer su menor cierre frente a una canasta dólar-euro desde 2009, rompiendo el límite de la banda fijada por el banco central.
La rupia india cayó 0,7% a su mínimo de dos meses tras retroceder 1,8% la semana pasada, su mayor declive de cinco días desde el 30 de agosto.
En Asia, la mayoría de las monedas emergentes retrocedió, con el ringgit de Malasia y el peso de Filipinas cayendo a su menor nivel frente al dólar en más de tres años.
La rupia de Indonesia lideró las bajas en la región, ya que su déficit de cuenta corriente la ubica como una de las economías más vulnerables al ajuste de la Fed. El won de Corea del Sur retrocedió 0,3% a su mínimo desde septiembre mientras los inversionistas retiraban US$ 476,3 millones de la bolsa de Seúl, la mayor salida de capitales desde el 12 de diciembre. “Hay una estampida, así que los inversionistas no están diferenciando entre nombres de alta y baja calidad”, precisó Thomas Kressin, jefe de tipo de cambio para Europa de PIMCO.
Bolsas en picada
La caída de las monedas emergentes arrastró además a las principales bolsas de Asia, donde ha revivido el fantasma de la crisis de 1997. “Con la debilidad de las divisas siendo impulsada primariamente por la salida de capitales, la debilidad asociada en crecimiento podría llevar a una reevaluación de la salud fiscal”, señaló Rashique Rahman, jefe de estrategia para tipo de cambio emergente de Morgan Stanley.
El índice MSCI de mercados emergentes cayó 1,8% , encaminándose a su menor nivel desde fines de agosto. Los índices bursátiles de Japón lideraron ayer las bajas con el Topix retrocediendo 2,8%, seguido por el Nikkei 225 que perdió 2,51%, mientras que el índice composite de Yakarta de declinó 2,58%.
Los fondos en acciones de mercados emergentes extendieron en la tercera semana de 2014 la mayor racha de salida de capitales desde 2002, según un reporte de EPFR Global.