La
canciller alemana, Angela Merkel, insistió en la promesa de la actual coalición
de Gobierno, formada por democratacristianos, socialcristianos bávaros y liberales,
de bajar los impuestos, pese al elevado déficit y los graves problemas
presupuestarios.
"No
cuestiono la reforma estructural impositiva", afirmó Merkel en una
entrevista que publica hoy el rotativo económico "Handelsblatt", en
la que comenta que la acordada rebaja de los impuestos "se puede aplicar
hasta 2011 según el acuerdo de coalición. Y así será".
La
canciller interviene así después de semanas de silencio en el debate abierto
entre las formaciones de la coalición gubernamental sobre las posibilidades de
financiar dichas rebajas impositivas cuando el endeudamiento ha alcanzado
cifras récord.
Varios
dirigentes regionales de la Unión Cristianodemócrata que preside Merkel
habían criticado en las últimas semanas los planes para rebajar los impuestos,
toda vez que repercutirían especialmente en las arcas de los Länder.
Aunque no
especifica el volumen de las rebajas impositivas que podrían aprobarse hasta
2011, la canciller asegura que esas medidas se financiarían por si solas, ya
que darían nuevos impulsos a la coyuntura.