El Banco Central Europeo (BCE) decidió hoy mantener los
tipos básicos de interés en la zona del euro en el 4,25%, pese a que la crisis
financiera ha encarecido el crédito.
La institución europea también dejó inalterada la facilidad
marginal de crédito, por la que presta dinero a las entidades, en el 5,25 %,
así como la facilidad de depósito, por la que remunera el dinero, en el 3,25 %.
Los expertos coincidieron al prever que el banco europeo iba
a mantener las tasas debido a que persisten las presiones inflacionistas a
medio plazo en los países que comparten el euro.
El analista de Commerzbank Christoph Balz dijo a EFE que
"los peligros inflacionistas a medio plazo son tan altos que el
debilitamiento coyuntural y las turbulencias financieras no son suficientes
para bajar los tipos de interés".
Commerzbank pronostica que el consejo de gobierno del banco
europeo mantendrá un compás de espera y que bajará el precio del dinero en el
área euro en febrero del próximo año.
"Los mercados de valores desean un recorte de las
tasas, pero este movimiento no ayudará a mitigar las actuales tensiones en el
mercado de dinero, ya que se producen por una falta de confianza", según
Balz.
A partir de las 12.30 horas GMT, el presidente del BCE,
Jean-Claude Trichet, dará más detalles de las deliberaciones del consejo de
gobierno en una conferencia de prensa, que también se transmitirá en directo
por la página de internet de la entidad en inglés, alemán y francés.
Trichet informará de la situación de los mercados
financieros tras el aumento de la volatilidad en las dos últimas semanas y ante
una escasez de liquidez en los mercados interbancarios que ha llevado a los
principales bancos centrales del mundo a inyectar dólares de forma coordinada.
Los expertos prevén también que el presidente del BCE
advertirá del riesgo de que se produzcan efectos de segunda ronda, es decir que
el aumento de la inflación se traspase a reivindicaciones salariales elevadas y
a otros precios.
Por ejemplo, el sindicato mayoritario del sector del metal
en Alemania, IG Metall, exige en las actuales negociaciones un aumento salarial
del 8 %, el más alto desde 1992.
Además, el BCE podría manifestar en la rueda de prensa
cuáles son sus actuales pronósticos de crecimiento para el cuarto trimestre del
año.
Hasta ahora el banco europeo había considerado que la
economía del área euro se debilitaría en el segundo y el tercer trimestre y que
remontaría en el cuarto.
Los últimos indicadores económicos apuntan ya una notable
ralentización del ritmo de crecimiento en los últimos meses de este año.