Las preocupaciones sobre el mal estado de la economía
estadounidense y el alto precio del crudo pasaron factura el viernes a Wall
Street, una factura que hoy llega a la bolsa japonesa que ha terminado la
jornada con pérdidas del 2,12%, hasta los 14.181 puntos.
Los recortes de más del 3% que afectaron en la sesión del
viernes a las principales bolsas estadounidenses tras conocerse el peor dato de
paro de los últimos 22 años no han pasado desapercibidos para la renta variable
japonesa, donde desde el inicio de la sesión se impuso la venta de papel. Con
lo cual, el principal indicador asiático deja atrás los máximos de seis meses con
los que concluyó la semana precedente y se prepara para afrontar nuevos
descensos.
En la región las caídas fueron generalizadas. El indicador
MSCI Asia Pacific cedió un 1,1%, y en lo que va de año acumula ya retrocesos el
11,2%, mientras que las bolsas chinas de Shanghai y Shenzhen han permanecido
cerradas por la celebración del Festival Duan Wu, o de las carreras de
barcos-dragón, que conmemoran la figura del antiguo poeta chino Qu Yuan. La
bolsas de Australia, China, Hong Kong y Filipinas también han permanecido
cerradas por festividad. En Taiwan en Taiex cedió un 1,8% mientras que el
surcoreano Kospi cerró un 1,3% a la baja.
Las compañías ligadas a las exportaciones y los valores
financieros han sido las más afectados por las caídas en la bolsa japonesa. El
fabricante de componentes para automóviles Denso, cedió un 4,16% su mayor
retroceso en tres meses, mientras que Canon, recortó un 3,39%, y condujo a los
números rojos a todos los fabricantes de productos electrónicos.
El sector financiero fue otro de los que más acusó las
caídas por verse afectado por la crisis crediticia a la que se enfrentan los
mercados. Mitsubishi UFJ, el mayor banco nipón cedió un 3,47%, mientras que la
segunda y la tercera entidad del país Mizuho Financial y Sumitomo Mitsui Financial
recortaron cerca del 3%.
Y al margen de las pérdidas ha destacado la petrolera Inpex Holding
que se revalorizó un 3,85% aprovechando la escalada de precios del crudo que el
viernes avanzó un 8,4% en Nueva York, hasta los 138,54 dólares por barril, el
mayor incremento desde junio de 1996. Esta compañía sólo fue superada en la
jornada por el fabricante de baterías GS Yuasa que avanzó un 10,8% y se colocó
como el mejor valor de los 225 del Nikkei.