El rebote del precio del petróleo no impidió que la
Bolsa de Tokio concluya la sesión con ligeras subidas tras permanecer
prácticamente toda la jornada en rojo.
Tras los descensos de ayer el Nikkei sumó esta jornada un
0,37%, hasta los 13.978 puntos, y se apoyó en valores como Chiyoda que
experimentó un rebote superior al 8% y en los relacionados con las materias
primas. Y todo pese a conocerse un dato macroeconómico que no cayó
especialmente bien en el mercado, la balanza comercial de Japón.
La segunda mayor economía del mundo redujo su superávit
comercial en un 46,3%, hasta los 485.000 millones de yenes (2.993 millones de
euros) en abril, respecto al mismo mes del año anterior, según datos del
Ministerio de Finanzas nipón. Las importaciones aumentaron un 11,9%, hasta los
6,41 billones de yenes. Por su parte, las exportaciones también crecieron,
aunque de manera más moderada, en un 4%, hasta los 6,89 billones de yenes.
La escalada de precios del petróleo por encima de los 135
dólares por barril ha dado alas a las principales petroleras del país. Nippon
Oil, el mayor distribuidor japonés de oro negro, terminó con subidas del 5,3%,
su mayor rebote de los últimos cuatro meses. El comportamiento de otras
empresas relacionadas con las materias primas fue también al alza, ayudado
asimismo por la debilidad del dólar frente al yen, que estableció su cambio en
las 102,96 unidades. Nippon Mining rebotó un 4,2%.
Las subidas también hicieron acto de presencia en Chiyoda,
el valor más alcista de la sesión y el que más impulsó al selectivo tokiota
tras experimentar un repunte del 8% al calor de una recomendación de la casa de
valores CLSA que elevó su recomendación de 'vender' a 'mantener'.
Recortes
En el lado opuesto destacó Sanyo Electric, el mayor
fabricante del mundo de baterías recargables, que registró su mayor caída en
seis semanas tras anunciar que prevé incrementar un 22% sus ganancias en actual
el ejercicio fiscal debido a la mayor demanda de baterías y que espera reducir
un 34% su beneficio operativo debido a los altos costes de los materiales y a
la fortaleza del yen. Estas previsiones han sido inferiores a lo esperado por
los analistas y sus títulos han saldado la sesión con recortes del 4,88%.
Las caídas predominaron en el resto de bolsas asiáticas. El
índice regional MSCI encadenó su tercera jornada a la baja y cedió un 0,6%,
hasta los 491,89 puntos. Los recortes se impusieron en las aerolíneas ante la
imparable escalada del crudo y por temor a que este factor pueda hacer mella en
sus ganancias. La
australiana Qantas Airways y la coreana Korea Air
Lines terminaron con caídas del 4,6% y del 5,7%, respectivamente.