La defensa de Julio Ponce Lerou no consiguió probar ante el regulador el impacto de la crisis sub prime en la situación financiera de las Cascadas. Es más, la SVS indica que la defensa del controlador del grupo utiliza funcionalmente la cronología presentada.
Por esto, se descartan los argumentos de la defensa de Ponce Lerou, relativos a los efectos de la crisis financiera pueden explicar buena parte de las operaciones sociales, entre las que se consideran los aumentos de capital de éstas.
No obstante, la SVS repara en que la preocupación que existió entre 2008 y 2009 fue el sobreendeudamiento de las cascadas, que afectó la clasificación de riesgo de Pampa Calichera, disponiéndose de diversas medidas frente a dicha situación.
¿Condiciones más restrictivas de crédito?
Los créditos otorgados para la adquisición de acciones en 2008 consideraban que serían renegociados a largo plazo al vencimiento de su plazo original (mayo y junio de 2009).
La defensa de Ponce indicó que la irrupción de la crisis financiera en el mercado chileno hizo “que el compromiso manifestado por los bancos de renegociar al largo plazo quedara rápidamente en la historia”; versión respaldada por Patricio Arrau, que señaló que “las compañías se comenzaron a enterar de la negativa de los bancos de renegociar a largo plazo las deudas contraídas (para las compras de acciones), lo que este informamente considera plausible y verosímil en función de la situación imperante en esa época”.
El regulador es particularmente duro con esta última respuesta, destacando que “sin mediar interpretación alguna, sólo queda concluir que la defensa de Ponce, incluso ante su propio perito, no pudo documentar el hecho de que los bancos se negaron a renegociar las deudas contraídas en 2008, limitándose el Sr. Arrau a decir que ello le parece plausible”.
No se puede constatar
El regulador afirma en la resolución que el controlador indirecto de SQM no aportó ningún elemento que permitiera constatar la referida negativa a renegociar de los bancos durante ese período.
Es más, destaca que a petición de él rindió prueba testimonial Juan Carlos Cavallini, encargado de la división Banca Corporativa del Banco de Chile, a quien se le preguntó si las condiciones del mercado permitían que Banco de Chile otorgara créditos a corto plazo a Norte Grande y Oro Blanco con la posibilidad de renegociarlo más tarde; a lo que Cavallini respondió afirmativamente.
Luego le preguntaron si esta disposición cambió el segundo semestre de 2008 producto de la crisis, a lo que Cavallini contestó “obviamente la crisis tiene un efecto, pero en este caso había una estructuración que podría haber permitido refinanciar a más largo plazo”.
Frente a la versión de la defensa de Ponce que relata que este período tuvo al borde del default a las sociedades Cascada, la resolución indica “el efecto de la crisis financiera en dichas sociedades, de haber existido, debió ser muy acotado, toda vez que los documentos de esa época no entregan ningún antecedente que permita entender que dicha crisis impactó de manera importante a esas sociedades, no siendo materia de discusión en el directorio ni de comunicación a los accionistas”.
Para esto, la defensa presentó “casi exclusivamente” recortes de diarios, documentos que se refieren a la economía general y memorias de la SVS, sociedades anónimas e inversionistas institucionales, pero “no aporta ningún antecedente válido referido específicamente a la situación financiera de las Cascadas, limitándose a entregar informes relacionados a esa materia realizados especialmente para el procedimiento administrativo, como el del Sr. Arrau”.