El senador PPD, Guido Girardi, hace una autocrítica tras el resultado del balotaje, apelando a que la falta de unidad del mundo progresista le pasó la cuenta a Alejandro Guillier y que ahora el desafío es construir un nuevo proyecto político.
- ¿Cómo ve el resultado?
- Era el esperado por el comando. Reconozco el triunfo de Sebastián Piñera y de la derecha. Plantearles que vamos a ser una oposición constructiva, en el sentido de defender las reformas de la presidenta Bachelet.
- ¿Están dispuestos a la búsqueda de acuerdos?
- Hay que aprender. Lo que nos mostró la primera vuelta es que la sociedad chilena es progresista mayoritariamente, pero creo que la falta de unidad del mundo progresista, la capacidad de articular visiones, le pasó la cuenta, no le dio el respaldo y la confianza para conducir los destinos del país. Si queremos defender las reformas a futuro -y no como lo que ha ocurrido hasta el día de hoy-, debemos ponernos en función de un bien común superior.
- ¿El Frente Amplio tiene una responsabilidad en esta derrota?
- La responsabilidad es de todos, también es nuestra.
- ¿“Nuestra” en el sentido de haber acogido las propuestas del Frente Amplio?
- Creo que pudimos haber hecho un poco más, pero esto no empezó en la segunda vuelta. Creo que viene de la propia incapacidad de la Nueva Mayoría de tener una primaria.
- ¿Y la Democracia Cristiana tiene responsabilidad en ello?
- Siempre hay algunos que pueden tener mayor o menor responsabilidad pero creo que no tiene sentido buscar chivo expiatorio. Lo que ocurrió no puede volver a suceder y hoy tenemos que mirar hacia adelante.
- ¿Cuál es el desafío ahora?
- Debemos articular un proyecto de país progresista, con un énfasis en las libertades civiles, en el derecho a decidir de las personas. Pero también un énfasis en el crecimiento económico, en el desarrollo, en el progreso y la protección del medioambiente.
- ¿Cómo ve que Sebastián Piñera haya acogido temas como la gratuidad?
- Lo importante es que las ideas progresistas son mayoritarias en Chile y, de cierta manera, hemos ganado culturalmente, no políticamente.
- ¿Existe un problema de cómo los partidos socialdemócratas se articulan teniendo en cuenta el escenario internacional?
- Es evidente que hay una crisis del proyecto socialdemócrata a nivel mundial que no tiene respuestas para los desafíos que vienen en el siglo XXI. Y esa falta de respuestas plantea que también no tengamos un proyecto que garantice entusiasmar e incorporar a los ciudadanos.