El Grupo de Política Monetaria (GPM) recomendó hoy, reducir la tasa de política monetaria (TPM) del Banco
Central en 25 puntos base, dejándola en 0,50%.
El Banco Central deberá decidir este jueves sobre el futuro de la tasa de
interés, que actualmente se encuentra en un nivel de 0,75%. El grupo está integrado por los economistas Tomás Flores, Juan Eduardo Coeymans,
Alejandro Fernández, Ángel Cabrera y Franco Parisi.
Los economistas reconocieron que una rebaja de 25 puntos tendría un
efecto "marginal", sin embargo, "es el último granito de arena que
puede aportar la política monetaria tradicional", dijo Cabrera.
En tanto, hubo un voto disidente respecto a esta recomendación, entregado por Alejandro Fernández, quien se
mostró a favor de la mantención de la
TPM, debido a que consideró que "si bien la reacción de
la economía ha sido menos dinámica de lo esperado, se debería empezar a
observar una mejoría en los próximos meses".
Recuperación lenta
El grupo consideró además que
"existe una probabilidad alta de que la recuperación de la economía
chilena se atrase un poco más de lo esperado".
Asimismo, señalaron que es muy probable que el desempleo
siga aumentando y que la inflación se mantenga a la baja, "por lo que existe un
espacio amplio para seguir administrando una política monetaria expansiva".
Respecto a los dichos del ministro de Hacienda, Andrés Velasco, y de la Presidenta Michelle Bachelet esta mañana respecto a una "estabilización" en la caída del último Imacec de mayo que fue de -4,4%, Coeymans indicó que "no ha seguido bajando, pero estamos en un hoyo".
"La caída fuerte de la economía se dió entre septiembre y diciembre del año pasado. Lo que hemos visto de enero a la fecha es una caída que todavía se sigue dando, pero a un nivel mucho más tenue. Y eso permite pensar que en los próximos meses vamos a ver ya una estabilización más clara", apuntó.
Medidas adicionales
El GPM consideró que una vez efectuada esta reducción, "el instrumento basado en la TPM estaría agotado como
herramienta de estímulo monetario".
Dado esto, afirmaron, "dependiendo de la evolución de
los datos de inflación y actividad durante los próximos meses, consideramos que
podría ser necesario analizar el uso de herramientas alternativas como el uso
de políticas monetarias cuantitativas".
Alejandro Fernández explicó que estas medidas adicionales pueden ser "inyectar
recursos por la vía de compra de deuda" o la compra
de dólares por parte del Banco Central. El economista señaló que esto significa un aumento importante en la cantidad de
dinero en el mercado.
Por su parte, Angel Cabrera apuntó que "solamente recomendaría
su aplicación si es que en los próximos tres meses la cifra de Imacec fueran más
negativas que 5%".
"Si vemos cifras en torno al -4%, o mejores que eso, yo no
voy a recomendar usar herramientas no típicas", puntualizó.