Agosto pareciera ser el mes en que se consolidaron las mejores expectativas para la economía chilena, en términos de cifras como la producción industrial, el Indicador Mensual de Actividad Económica (Imacec) y el empleo.
Así se desprende del Índice de Sorpresas de Actividad, realizado por Banco Itaú, que reveló que en el octavo mes del año los resultados macro informados en el país se ubicaron por sobre las expectativas.
El instrumento se construye a partir de las estimaciones de los analistas -consolidados en Bloomberg- para cuatro datos clave: producción manufacturera, ventas del retail, desempleo e Imacec. Esos pronósticos se contrastan con los datos efectivos.
En el mes, destacó el reporte, se dio a conocer la producción manufacturera de julio, que creció 2,6% y superó el 2% del consenso de los expertos. Para dicho lapso, la tasa de desocupación se ubicó en 6,9%, por debajo del 7,1% que anticipaba el mercado.
También se conocieron indicadores de comercio de junio -que superaron lo previsto- y el Imacec del sexto mes del año, que avanzó 1,4% (versus 1,1% de consenso).
A pesar de las sorpresas positivas, el indicador registró un nivel de -0,26 puntos, peor que el -0,21 de julio. ¿La razón? Que el índice es una media móvil de tres meses, lo que produce que continúen predominando las noticias que decepcionaron a los analistas en los meses previos.
Si el índice se ubica sobre cero unidades se considera que los indicadores sorprendieron al mercado, mientras que bajo cero significa que lo decepcionaron.
A pesar del saldo favorable en materia de actividad, Itaú advirtió en su informe que el mercado laboral continúa generando holguras, “a medida que el crecimiento del empleo asalariado privado sigue sin tener fuerza”. Así, proyecta un crecimiento del PIB de 1,3% para el actual ejercicio.
El resto de la región
Como un todo, el índice para América Latina se mantuvo en un nivel positivo al ubicarse en 0,14 puntos en el mes, una baja de dos décimas respecto a julio. Esto significa que en el consolidado para Brasil, Chile, Colombia, Perú y México los datos efectivos dieron un respiro al mercado en el período.
El indicador subió en Brasil (desde 0,22 puntos a 0,30), mientras que cayó en México (de 0,16 a 0 unidades en el mes), Colombia (-0,11 a -0,23) y Perú en el séptimo mes del año (pasando desde 0,34 en julio a 0,03 en agosto).
Exportaciones pasan agosto y crecen a su mayor ritmo desde fines de 2015
Auspiciosas resultaron las cifras de comercio exterior en agosto. El Banco Central informó ayer que las exportaciones sumaron US$ 6.100 millones, lo que representa un alza anual de 23,3%, la mayor desde diciembre de 2015.
Los envíos de cobre, en particular, llegaron a US$ 2.994 millones, un 33,7% más que en el mismo mes del año pasado. Los agrícolas se expandieron 29,2% y las industriales 10% en el mismo lapso. Las importaciones también mejoraron, aunque en menor cuantía: 6,5% para alcanzar a US$ 5.866,2 millones en agosto de este año, destacando el incremento de las compras de bienes de consumo -con un 14,5%-, seguido de aquellas de bienes intermedios -4,39%- y las de capital-0,04%-.
Dado este comportamiento, la balanza comercial experimentó un superávit de US$ 597,23 millones en el octavo mes del año, lo que se compara favorablemente con el déficit por US$ 234,5 millones anotado en igual período del año pasado.
Comercio y minería lideran alzas de remuneraciones
Un 0,6% aumentaron los índices nominales de remuneraciones (IR) y de costo de la mano de obra (ICMO) durante julio, según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE). En doce meses, las alzas fueron de 4% en el primero y de 5,7% en el segundo, lo que equivale a una mayor velocidad que la observada previamente.
Por sectores, destacó la incidencia mensual del comercio por los incentivos y premios, comisiones por ventas y sueldo base. Luego se ubicó minería, donde también hubo incentivos y premios, y sueldos y salarios por funciones ocasionales. Otro rubro relevante fue enseñanza, también reflejo de beneficios. En contraste, administración pública, seguido por información y comunicaciones, consignaron caídas. Mensualmente, las horas totales por trabajador no anotaron variación, dado que la baja de las ordinarias (-0,1%) fue contrarrestada por el aumento de las extraordinarias (2,7%). En doce meses, se registró una disminución en las totales (-1,5%), arrastrada por las ordinarias (-1,4%) y extraordinarias (-9,1%).