Eso sí, esta vez las razones difieren de lo ocurrido a mediados de 2024, cuando la normalización de las tarifas eléctricas -luego de que haber sido congeladas en el marco del estallido del conflicto social- presionó la inflación total.
El aumento acumulado de alrededor de 60% en el precio de la electricidad agregó en torno a 1,5 punto porcentual a la medición de los precios internos, recordó hace unos días el consejero del Banco Central, Alberto Naudon, en un evento organizado por Picton.
Así, este factor ha mantenido el nivel de la inflación por sobre la meta de 3% del Central, objetivo que no alcanza hace casi ya cinco años.
Esta vez el panorama es distinto.
“Los temas relevantes serán los indicadores subyacentes de inflación, que revirtieron su tendencia a la baja, y la dificultad que el tipo de cambio baje hacia su nivel de equilibrio”, dijo Tomás Izquierdo.
Hace dos semanas, la Comisión Nacional de Energía (CNE) reveló que identificó un error metodológico en el cálculo de las tarifas eléctricas residenciales, ya que se aplicó dos veces el incremento del Índice de Precios al Consumidor (IPC), provocando así un sobrecosto.
El hecho atrajo las miradas del mercado, dado el eventual impacto que podría tener en la inflación; y el propio banco señaló a DF que “este tema será material de análisis en la próxima RPM”.
Luego se conoció el sobrecosto por parte de la transmisora de Transelec, que se traducirá en una rebaja de las cuentas de la luz de entre 1,5% y 2% en enero.
Frente a ello, “hay altas expectativas de lo que pueda decir el comunicado y la minuta de la reunión de octubre. Sin embargo, con la información disponible, no espero que este tema tenga impactos inflacionarios relevantes y, en consecuencia, el error no modificaría la trayectoria de la política monetaria delineada en el último IPoM”, opina el socio de Valtin Consulting, Hermann González. Y suma otro ingrediente: “Como este es un tema que depende de decisiones que debe tomar el Ejecutivo y, como es probable que esto no esté resuelto en el corto plazo, una posibilidad es que el Banco Central no pueda emitir aún opiniones concluyentes sobre el impacto final de este error en la determinación de las tarifas”.

El gerente general de Gemines, Tomás Izquierdo, considera que el impacto de este sobrecosto en la inflación “no es relevante en una mirada más técnica, porque tiene escasa incidencia”. A ello se une que cualquier efecto es “por una vez”.
Así, el economista no cree que se incorpore el tema en el comunicado, aunque dice que probablemente se hablará en la reunión.
Pese a que si esto se corrige mediante “devoluciones” no impacta en precios y, por ese lado, no habría impacto en inflación hacia abajo y que la magnitud de la que se está hablando no tiene mayor impacto en el IPC, la economista jefa de Prudential AGF, Carolina Grünwald, sostiene que “es importante aclarar la situación y explicar tanto al mercado como a la ciudadanía las implicancias de este error. Ojalá detallando con incidencias”.
Por otro lado, el economista jefe de Pacífico Research, Igal Magendzo, opina que este cambio en las cuentas de la luz es “poco significativo” y lanza una dura crítica: “El Banco Central viene arrastrando fallas comunicacionales. Que la presidenta diga que revisarán si hay un efecto material admite que no detectaron el error y mucho menos sus implicancias, similar a cuando descongelaron las tarifas. Con tantos economistas de primer nivel, esto pega directo en la credibilidad técnica del Banco”.
Otros cambios
Pero las cuentas de la luz no serán el único elemento que el ente autónomo deberá poner en la juguera en la reunión de este lunes y martes, donde el mercado espera que el tipo rector se mantenga en 4,75%.
“Los temas relevantes serán los indicadores subyacentes de inflación, que revirtieron su tendencia a la baja, y la dificultad que el tipo de cambio baje hacia su nivel de equilibrio, en un contexto de bajísimo diferencial de tasas con Estados Unidos”, plantea Izquierdo.
La última vez que el Consejo tuvo una RPM fue el 9 de septiembre. En esa ocasión, se optó -de forma unánime- por mantener la tasa clave en 4,75%.
Desde entonces, la inflación total subió desde un 4% a un 4,4%, mientras que la sin volátiles se mantuvo en 3,9%.
Por su parte, el Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec) anotó un avance anual de 0,5% en agosto, debido, en parte, a una menor producción minera provocada por el accidente en la mina El Teniente.
Mientras que este viernes el tipo de cambio se acercaba a niveles de $ 940, lo que implica una apreciación desde el $ 968 en que cerró el día de la última RPM.
El cobre, a su vez, se ha acercado a niveles de US$ 5 la libra tanto en el Comex como en la Bolsa de Metales de Londres.