Economía y Política
Necesidad de mayor recaudación motivaría revisión argentina de acuerdo de doble tributación
El anuncio generó preocupación al interior del comité ejecutivo de la CPC, donde acordaron tocar en mayor profundidad, la posible derogación del tratado y su implicancia.
Por: Equipo DF
Publicado: Miércoles 30 de marzo de 2011 a las 05:00 hrs.
Gonzalo Cerda Milla
Tras conocer la decisión de Argentina de revisar todos sus acuerdos de doble tributación, expertos coinciden en que el motivo que gatillaría la evaluación, en primer término, del tratado con Chile, sería que las inversiones de chilenos en el país trasandino no están gravadas con el impuesto a los bienes personales.
Así lo explica el abogado tributario argentino, Ignacio Fernández, de la firma Luna Requena Fernández Borzese, quien señala que “este impuesto, que se aplica desde 2005 sobre la participación accionaria de compañías o de personas extranjeras sobre sociedades locales, no se contempla en ese tratado”.
Esto, se traduce en que el convenio suscrito con nuestro país “excluye a chilenos que tienen acciones en compañías argentinas del pago de este gravamen”.
Tal como explica Fernández, actualmente, de los 17 tratados que tiene suscrito Argentina, sólo tres están exentos de este impuesto: Chile, España y Suiza.
“Lo que puede hacer Argentina es denunciar el acuerdo, dejarlo sin efecto por sentir que el escenario actual no se condice con este tipo de tratado. Aunque todavía no está bien claro que lo quiera hacer”, sostiene.
La opción que tiene el país trasandino, agrega, es que “se le proponga a Chile eliminar esa ventaja, o de lo contrario, unilateralmente, derogar el acuerdo”.
Fernández, además plantea un reparo ante la actual conformación de la comisión revisora creada por las autoridades argentinas. “Nos parece cuestionable que sea la Administradora Federal de Ingresos Públicos (AFIP) -símil del Servicios de Impuesto Internos (SII) de Chile- quien encabece la presidencia de esta comisión, dado que este organismo tiene a su cargo la recaudación de tributos, pero no la promoción de las inversiones”.
Y agrega: “Nos preguntamos ahora la suerte que correrá el convenio con Chile, en cuanto al nivel de inversión en valores chilenos y la tenencia de acciones de sociedades argentinas por residentes del país trasandino”, señala.
Esta medida podría desincentivar las inversiones al eliminar un instrumento que brinda previsibilidad en los negocios, puntualizó Fernández.
Mayor recaudación
En tanto, la agregada comercial de Chile en Argentina, Iris Boeninger, señala que esta medida “no está ni en el temario ni en la agenda comercial de ambos países en este momento”.
Según explica, Argentina pretende revisar los convenios con aquellos países con los que no ha habido tanta inversión, lo que no es el caso de Chile, que tiene invertidos cerca de US$ 16.000 millones, lo que se traduce en un grupo de empresas que tributan unos
US$ 2 mil millones.
“Ellos están queriendo revisar todo porque, a lo mejor, necesitan recaudar más, están haciendo una evaluación de costos/beneficios de tener convenios de doble tributación o no tenerlos”.
En el caso de Chile, señala, lo que Argentina está buscando no es eliminar el tratado, sino que “una parte que tiene que ver con el impuesto al patrimonio personal, pero, en todo caso, no es unilateral la decisión”.
Modernización del acuerdo
El tratado con Argentina es un acuerdo “sui generis”. Así lo califica el abogado tributario chileno, Juan Pablo Cabello, de Cabello, Letonja y Cia., quien explica que este convenio, que se suscribió en 1976 y fue ratificado en 1986, no se apega a las normas actuales de la OCDE que tienen todos los otros tratados firmados por Chile.
“Desde el punto de vista chileno, argentino y de los inversionistas, no debiese ser un tema su derogación, aunque eso no lo veo posible”.
La inviabilidad de la eliminación, afirma Cabello, es que los inversionistas no van a acceder ante una modificación como esa, “porque es retroceder, es cambiar un modelo que si bien no es perfecto, es mejor a no tener nada” explica.
Desde su perspectiva, “accederían a que se modifique el modelo, lo que, en términos generales, es mejor, ya que se homologaría al de la OCDE que tiene suscrito Chile con el resto de los países”.
Cabello sostiene que esto es pensando en que Chile tiene más inversiones en Argentina que viceversa. “Los sectores que se verán modificados con la eventual derogación del acuerdo pueden ser el sector comercio, minero y forestal”, señala Cabello.
Preocupación del empresariado
Según fuentes cercanas a la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), durante la reunión de ayer del comité ejecutivo la eventual derogación del acuerdo de doble tributación por parte de Argentina, fue visto con preocupación por los asistentes.
Si bien fue de modo superficial, desde la multigremial reconocieron la inquietud que genera el proceso dado la magnitud de las inversiones chilenas en ese país.
Esta situación generaría un retroceso en las relaciones comerciales entre ambas naciones, afectando no sólo a los capitales chilenos, sino que también a las empresas trasandinas que residen en el país.
De esta forma, el comité acordó tocar en profundidad el tema, dejándolo como “pendiente” para analizar sus implicancias y los pasos a seguir.