Por P. Ojeda / R. Carrasco
El complejo escenario que enfrentaba el gobierno para aprobar la reforma tributaria enviada hace dos meses al parlamento obligó al gobierno a retirar la iniciativa y presentar un nuevo texto simplificado, acotando las modificaciones, eliminando algunos puntos y reestructurando otros; todo lo anterior con la intención de despachar de manera fast track el proyecto, para lo cual aplicó de inmediato la urgencia de “discusión inmediata”.
Pero la nueva propuesta del Ejecutivo contempló cambios radicales en su diseño inicial y dejó de lado algunos temas polémicos como los “impuestos verdes”, que serán analizados en otra iniciativa; la reducción de impuestos a las personas de más altos ingresos; la rebaja de aranceles, que fue discutida por expertos en comercio internacional; y el alza de impuestos a los alcoholes sobre 40 grados, que fue ampliamente discutida por empresarios del rubro.
Además, el Ejecutivo optó por establecer un tratamiento simplificado de las modificaciones a los mecanismos anti elusión y por fijar una rebaja del impuesto de timbres y estampillas hasta un 0,4%, la que anteriormente se dejaba en 0,2%.
Entre los principales ítem que se mantienen del proyecto original se cuenta el alza del impuesto de primera categoría de 17% a 20% y el incentivo por educación, que se entregará a las familias cuyo ingreso sea inferior a las 66 UF (casi $ 1,5 millón a la UF de ayer).
Pese a que el presidente Sebastián Piñera manifestó ayer que este proyecto “va a significar una recaudación neta, durante el año 2013, de US$ 1.230 millones, y el destino de esta mayor recaudación va a ser 100% para financiar en forma seria y responsable la reforma educacional”, lo cierto es que la recaudación neta del plan implica una baja de US$ 94 millones respecto al plan original.
Según el informe financiero que presentó el gobierno en abril, la reforma proyectaba recaudar como efecto neto entre los años 2012 y 2017 un total de US$ 4.732 millones, mientras que en el proyecto que ingresó ayer al Congreso, el total de recaudación neta del informe financiero de la Dirección de Presupuestos del Ministerio de Hacienda asciende a US$ 4.638 millones en el mismo lapso de tiempo (ver tabla nueva proyección).
Las principales diferencias de recaudación se darán en 2013 y 2014. Tal como señalaba el mandatario, el próximo año se registrará un aumento de recaudación neta de la reforma de US$ 1.230 millones versus los US$ 1.166 millones del proyecto original, mientras que para el 2014 se proyecta un efecto inverso al esperar una recaudación de
US$ 712 millones que difieren de los US$ 1.003 millones que se proyectaban en la primera iniciativa.
Al respecto, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, explicó que “hay un reducción de los aumentos de recaudación y una reducción de la disminución de recaudación, de tal manera de mantener la recaudación neta estable , muy similar al proyecto anterior. Y de esta manera hemos dejado también afuera la reducción del arancel aduanero, estamos convecidos que es un buen proyecto pero queremos privilegiar rebajar del impuesto a las persona y la pyme”.
En tanto, el presidente Piñera precisó que los alivios tributarios corresponden a “una disminución en el impuesto a las personas de clase media, que es mayor la reducción mientras menor sea el nivel de ingreso de la persona. Y, por tanto, esa reducción va desde un 15% en los sectores de ingresos más bajos, que son contribuyentes, hasta un 0% en las rentas más altas, que van a mantener su tasa marginal del 40%”.
Pese a esta percepción positiva del Ejecutivo, el presidente del Senado, Camilo Escalona PS, aseguró que lo ocurrido es una “derrota del gobierno”, que vio “en la obligación de reemplazar el proyecto original, porque la sociedad chilena rechaza disminuir el impuesto a los más ricos”.
Retiros en exceso en la polémica
Una de las polémicas del proyecto es la eliminación del ítem de retiros en exceso, que era una de las herramientas de mayor recaudación del proyecto, con un total de US$ 2.033 millones entre 2014 y 2017, y que ahora no aparece entre las prioridades. El economista de la U. Adolfo Ibáñez, Claudio Agostini, plantea que “a priori no veo ninguna razón para que hayan reducido eso, de las cosas potentes que tenía este proyecto era una actualización de todas las normas anti-elusión en forma bien importante (...) ahora algunas se excluyen, las que ellos calculaban que recaudaba más que era la del exceso de retiro, que yo creo no recaudaba lo que dicen pero la sacaron. Entonces desde el punto de vista de dónde suman los
US$ 1.200 millones (para 2013), de verdad que no sé de dónde suman”.
Una opinión similar manifestó Alejandro Micco, economista de la U. de Chile, quien afirma que “por perfeccionamiento hay una caída importante de ingreso en régimen, del orden de los US$ 550 millones. A mí simplificarlo me parece perfecto, pero en términos de recudación no se hizo un esfuerzo y se sacan los temas que el propio gobierno calificó como importantes para combatir la elusión”.