La empresa concesionara española Obrascón Huarte Laín (OHL) se encuentra en una profunda picada y no logra romper la caída. La firma, que en Chile se adjudicó recientemente la construcción de un tramo de la autopista Vespucio Oriente, se hundió 24% ayer en la bolsa de Madrid, a un mínimo de trece años, luego de que Moody’s recortara su calificación advirtiendo sobre la baja de sus ingresos y el aumento de sus deudas.
Con este último retroceso, la empresa ha perdido 42% de su valor bursátil en sólo cinco sesiones y más de 50% desde comienzos de año.
OHL reportó el domingo una caída de 94% en sus ganancias del primer semestre a 3 millones de euros, debido, en parte, a la revisión de un proyecto de construcción en Montreal. Aunque recaudó 999,1 millones de euros con un aumento de capital en agosto, su nivel de apalancamiento aumentó en junio a 13,9 veces sus ganancias, una relación que según Moody’s es “demasiado alta para mantener su anterior nota”. La agencia bajó la calificación del grupo de B2 a B3, ambas dentro de la categoría especulativa, al igual que la de sus instrumentos de deuda senior no garantizada, y los puso en perspectiva negativa.
Argumento de la agencia
La medida fue “motivada principalmente por una mayor caída en las ganancias del negocio central de construcción de OHL” en el primer semestre tras una “significativa baja” en el cuarto trimestre del año pasado, explicó el analista de Moody’s, Matthias Heck. Estos resultados “se tradujeron en un flujo libre de caja negativo considerable y crecientes niveles de deuda”.
Como parte del aumento de capital, el grupo controlador vendió derechos preferenciales de suscripción de acciones al hedge fund Tyrus Capital, que ahora estaría demandando compensaciones por la caída en el valor de los títulos, dijo el medio español, El Confidencial.
El emblemático presidente del grupo, Juan Miguel Villar Mir, renunció a su cargo en junio y fue reemplazado por su hijo.