El 2016 fue, sin duda, un año lleno de incertidumbre, volatilidad, sorpresas electorales –con la mayoría de las encuestas fallando en sus mediciones– y un incremento en los ataques terroristas que abrieron el debate en la Unión Europea (UE) sobre el manejo de la crisis de los inmigrantes en la región.
Fue el año del Brexit en el Reino Unido, del triunfo del polémico republicano Donald Trump como presidente de Estados Unidos y de la discusión sobre el auge de corrientes populistas en el mundo. El año en que las consultas populares simbolizaron el rechazo al establishment político.
Y, a pesar de que a finales del año la salida de la nación británica de la UE estuvo prácticamente ausente del ámbito internacional, las negociaciones con Bruselas parecen estar retomando impulso precisamente cuando nuevas convocatorias a las urnas están previstas a lo largo de 2017 en países como Holanda, Francia, Alemania y, quizá, una anticipada en Italia.
Así, el ejemplo dado el 23 de junio de 2016 por los británicos pudiera empezar a marcar el rumbo del futuro del viejo continente e impulsar a los candidatos y partidos políticos a liderar campañas enmarcadas en el debate de la factibilidad de mantener en pie el proyecto europeo.
Por ello, el viernes la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente de Francia, François Hollande, hicieron un llamado a preservar la unidad de los países miembros de la alianza ante las diversas amenazas.
“Europa enfrenta grandes desafíos internos y externos que (...) sólo podemos superar trabajando juntos”, comentó Merkel, quien apuntó a la necesidad de “un compromiso claro y común con la UE, a lo que hemos logrado y a los valores de nuestras democracias liberales”.
En tanto, Hollande fue firme y pidió avanzar en medidas contra “el surgimiento de extremistas que usan factores externos para provocar agitación interna”.
Bombas de tiempo
Las dos principales bombas de tiempo que podrían marcar la pauta este año son Holanda y Francia.
En ambas naciones, suben como espuma los partidos anti establishment con sus discursos proteccionistas y con la promesa de convocar, eventualmente, un referendo sobre la permanencia de sus países en la UE.
Holanda será el primer país en someterse al examen el próximo 15 de marzo, donde los ciudadanos elegirán a los 150 representantes para la cámara baja.
Actualmente, gobiernan los liberales en coalición con el Partido Laborista, con el conservador Mark Rutte como primer ministro. Sin embargo, la tercera formación más votada en la última jornada fue el Partido de la Libertad, de Geert Wilders, que ha venido escalando en los sondeos hasta igualar en intención de voto al grupo en el poder con su idea clara de salir de la eurozona pronto.
Todo apunta a que los ultraderechistas seguirán sumando adeptos y por ello el Ejecutivo ha tenido que endurecer su discurso. Rutte envió un mensaje la semana pasada evocando los valores nacionales: “a los que no les gusta el país, deben irse”.
Con rostro de mujer
En tanto, en Francia, la amenaza de la ultraderecha antieuropea viene con rostro de mujer.
Marine Le Pen, líder del Frente Nacional, ha hecho del lento crecimiento económico, del desempleo entre jóvenes y de las decenas de ataques terroristas en el país, su fuerte.
En abril, los habitantes de la segunda economía de la UE celebran elecciones presidenciales y, desde ya, Le Pen se ha garantizado su paso a la segunda vuelta que será en mayo.
Según la última encuesta de Ipsos, se mantiene dos puntos por encima del republicano François Fillon, con 27% de aprobación, ambos favorecidos por los malos tiempos que atraviesan el actual jefe de Estado, François Hollande, y los socialistas.
Le Pen ha sabido mermar la imagen elitista de su padre con un discurso en el que se presenta como la salvadora de los obreros y agricultores galos, defendiendo medidas proteccionistas en lo económico y ultranacionalistas en lo social –cierre de fronteras, expulsión de emigrantes, retirada de ayudas sociales a extranjeros– y proponiendo la posibilidad de sumarse al Reino Unido en un proceso que llevaría el nombre de Frexit.
Sin unión no hay fuerza
Alemania celebrará su propio proceso en las urnas el 24 de septiembre de 2017.
Hasta hace nada, el camino para un cuarto período de la canciller Angela Merkel parecía relativamente claro. Sin embargo, el auge de atentados terroristas que han sacudido a la nación –atribuidos por sus opositores a la política de puertas abiertas a favor de los inmigrantes– y el surgimiento de Martin Schulz, ex presidente del Parlamento Europeo, como candidato al cargo por el partido socialdemócrata SPD, complican el panorama.
La coalición de la mandataria –la conservadora Unión Demócrata Cristiana y el SPD– se divide con dos frentes abiertos y todo parece indicar que quedaría por debajo del umbral del 50% de aprobación, con la euroescéptica Alternativa para Alemania (AfD) acercándose al 15% de respaldo, gracias a su mensaje anti inmigrantes.
Amenaza latente
Aunque Italia no tiene programado comicios para 2017, la posibilidad de unas elecciones anticipadas la convierte en una verdadera amenaza latente.
Ha sido la nación sucesora del Reino Unido, con la salida de su primer ministro –Matteo Renzi– del cargo luego de una dura derrota en el referendo constitucional de diciembre.
Este rechazo no ha tenido consecuencias directas sobre políticas concretas, pero sí ha abierto el camino para otras dos organizaciones: el populista Movimiento Cinco Estrellas (M5S), liderado por el ex comediante Beppe Grillo, y la Liga del Norte de Matteo Salvini, un gran aliado para una Francia liderada por Le Pen.
Con una galopante crisis bancaria y un continuo problema migratorio, el actual premier Paolo Gentiloni, tiene mucho que resolver. Con el reciente fallo de la corte que modifica el sistema electoral del país, las elecciones anticipadas pudieran ser la mejor carta bajo la manga para él.
Renzi prepararía su regreso mientras Grillo busca adeptos con la bandera de la salida de la moneda común y de la renegociación de la deuda pública en sus manos.
Así, países que representan el 40% de la economía de la región irán a las urnas y cada cita supondrá un nuevo examen para la clase política dominante ante el avance de las formaciones populistas.
UE alerta que ataques cibernéticos amenazan los comicios y pide aumentar defensas en la web
Al riesgo del aumento del populismo en Europa se suma la posibilidad de que terroristas cibernéticos estén planificando socavar las elecciones previstas para 2017 en el continente, especialmente en Francia y Alemania.
Así lo alertó la Unión Europea (UE) que envió un mensaje a los gobiernos del bloque sobre la posibilidad de que se lleven a cabo actos ilícitos en la web y les pidió fortalecer sus defensas contra las amenazas que pudieran originarse desde otros estados o pandillas cibernéticas.
"Es preocupante para la UE, que atravesará diversas elecciones nacionales este año, el uso de la capacidad cibernética para manipular procesos democráticos", dijo el Comisionado de Seguridad europeo, Julian King.
"No es difícil ver cómo un correo electrónico falso insertado en las cuentas de miles de millones de personas puede tener una poderosa influencia en la opinión pública", agregó.
Los líderes del bloque estarían preparándose para que la guerra online se intensifique a propósito de al menos cuatro elecciones polémicas este año, especialmente luego de ver cómo los servicios de inteligencia de Estados Unidos están acusando a Rusia de intervenir en el proceso electoral del pasado mes de noviembre y con la UE asegurando que fue utilizada propaganda desde Moscú para influenciar los referendos en el Reino Unido y Holanda el año pasado.
Noticias falsas
Un oficial de la UE, que pidió el anonimato por la sensibilidad del tema, aseguró a Bloomberg la semana pasada que Rusia estaba intentando dividir a la UE al difundir información falsa sobre el impacto de la migración, el origen del terrorismo y otros asuntos. La canciller alemana, Angela Merkel, –quien intenta mantenerse en el poder pero se ve amenazada por el avance del partido de ultraderecha Alternativa por Alemania– sería el mayor objetivo de Rusia para las "falsas noticias", según el funcionario.