El Fondo Monetario Internacional (FMI)
confía en que, a pesar de la fuerte desaceleración que provocará la
crisis financiera, las medidas globales adoptadas por la UE eviten
un "resultado peor".
"Hay lecciones que aprender de la crisis", afirmó el director de
la sección europea del FMI, Alessandro Leipold, en la presentación
del último informe sobre resultados económicos regionales para
Europa.
En opinión de Leipold, los progresos de Europa hacia la
integración económica y la respuesta común definida ante la crisis
son "positivos".
Según este economista, el FMI apoya la creación de "un supervisor
central fuerte" que trabaje conjuntamente con los países y mejore la
coordinación en la vigilancia de los mercados financieros.
Se mostró confiado en que, a pesar de la reticencia de algunos
estados, la crisis actual sea "una oportunidad para cruzar algunas
líneas rojas políticas".
Respecto a la apelación que la semana pasada hicieron los líderes
de la UE a organizar "un nuevo Bretton Woods", para reformar las
instituciones financieras multilaterales, Leipold apuntó que de
momento sólo hay "un titular", por lo que hay que esperar a ver cómo
se desarrolla la propuesta, aunque admitió que la idea le gusta.
El informe que el FMI presentó hoy en Bruselas, basado en la
información disponible hasta septiembre, prevé un estancamiento a
corto plazo de la economía europea.
Según sus cálculos, el Producto Interior Bruto (PIB) de la
eurozona crecerá el 1,3% este año y el 0,2% en 2009 y en toda la UE
el avance será del 1,7% y 0,6%, respectivamente.
Respecto a la inflación, el FMI prevé una moderación progresiva
en 2009, con lo que pasaría del 3,5% este año al 1,9% en los países
del euro, y del 3,9% al 2,4% en la UE.
Para España, el PIB crecerá este año el 1,4%, pero entrará en
recesión en 2009, con un retroceso del 0,2%.
La inflación española pasará del 4,5% previsto en 2008 al 2,6% el
año siguiente.