El director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI),
Dominique Strauss-Kahn, ha tranquilizado hoy los ánimos al asegurar que la
institución no "ve necesidad" de poner el foco en otro país de Europa
que no sea Grecia".
Strauss-Kahn respondía así en rueda de prensa al ser
preguntado si temía que se produjera un contagio de la crisis helena a otros
países como "Portugal y España", después de los credit default swaps
(CDS) de los tres países europeos renovasen hoy sus máximos históricos. Hoy
mismo, Moody's bajó el rating de Grecia a A3 y sus bonos a dos años rinden ya
más de 10%.
Con este recorte, el rating de Grecia se queda a sólo cuatro
escalones por encima del bono basura, y ha dejado la perspectiva en negativo,
por lo que podrían llegar más bajas en el futuro.
Para el director gerente del FMI, Grecia y su deuda soberana
sí supone "un problema serio" para la estabilidad del sistema y no
existe "ninguna bala única" para resolverlo de forma fácil.
Strauss-Kahn ha pedido a los ciudadanos griegos que acepten realizar
sacrificios para que el país pueda salir adelante de la crisis.