El Fondo Monetario Internacional (FMI) está dispuesto a
ayudar a los países que sufren actualmente las consecuencias de la crisis
crediticia, según su director gerente, el francés Dominique Strauss-Kahn.
"Muchos países parece que experimentan problemas debido
a la repatriación de los capitales privados por los inversores extranjeros o a
la reducción de las líneas de crédito por parte de la banca extranjera",
declaró Strauss-Kahn al diario Financial Times.
"Estamos dispuestos a ayudar a esos países y mantenemos
ya conversaciones con algunos de ellos", agrega.
Ayer, Hungría y Ucrania pidieron ayuda a las
instituciones internacionales para no acabar como Islandia al borde de la
quiebra.
Es la primera vez en los quince meses de crisis crediticia
que las agencias multilaterales como el Fondo Monetario Internacional aceptan
rescatar a países europeos, clara señal de las dificultades de los Estados
deudores para encontrar financiación en los mercados.
Según la primera ministra ucraniana, Yulia Tymoshenko, el
FMI está dispuesto a conceder a su país un crédito especial de hasta US$ 14.000
millones para estabilizar su sistema financiero.
Por su parte, el Banco Central Europeo ha creado una línea
de crédito de 5.000 millones de euros para paliar la escasez de esa moneda en
los bancos húngaros