El Fondo Monetario Internacional (FMI) dijo hoy que los temores sobre el
sector bancario europeo son probablemente "exagerados" pero insistió en
que la única forma de ahuyentarlos es realizar pruebas de solvencia
adicionales.
"La única forma de disminuir esos temores es con
una mayor transparencia", afirmó hoy en una entrevista con la revista
digital del FMI, "IMF Survey", el economista jefe del organismo, Olivier
Blanchard, quien añadió que en la práctica eso implica "pruebas de
solvencia más creíbles" y reglas más claras sobre quién asumiría las
pérdidas potenciales.
"Qué parte de las pérdidas absorberían
los acreedores, qué parte los gobiernos nacionales, qué parte la Unión
Europea", afirmó Blanchard.
Pese a los incesantes rumores
sobre posibles rescates del sector en el Viejo Continente, Blanchard
pronosticó que los rescates, ya sea por parte de la Unión Europea o los
gobiernos nacionales, serán "bastante limitados".
Por lo
demás, y aunque no citó casos concretos, insistió en que no hay dudas de
que "un número de países europeos" afrontan un ajuste macroeconómico
"largo y duro".
Afirmó que, de todos modos, muchos de los
países que han puesto en marcha paquetes de ajuste habrían tenido que
hacerlo igual aunque no hubiese habido crisis.
"La crisis global simplemente hace (el proceso) más duro", añadió el experto.
Recordó, en ese sentido, que varios de los países del Viejo
Continente optaron, basándose en un optimismo que resultó no tener
fundamento, por aumentar su demanda doméstica en exceso y algunos se
endeudaron hasta las orejas.
Ahora se impone, más que en el resto de economías avanzadas, la necesidad de hacer hincapié en el sector exportador.
"Para los países de la zona euro y que por lo tanto operan en un
sistema de tipo de cambio fijo va a ser un esfuerzo duro y largo",
pronosticó Blanchard.