Con el resultado que convertirá a José Antonio Kast en el nuevo Mandatario, el empresario Gonzalo Said cree que ya pasó el tiempo de los diagnósticos. Por esto, asegura: “La ciudadanía fue clara en las urnas. Ahora el desafío es responder con decisiones oportunas, acuerdos amplios y resultados concretos”.
A su juicio, hay tres prioridades evidentes, siendo lo primero la seguridad. Lo segundo es el crecimiento e inversión: “Es urgente pasar del diagnóstico a la acción, destrabar proyectos, avanzar en una modernización profunda del sistema de permisos y revisar el marco tributario con foco en competitividad”. Y, lo tercero, dijo el presidente de Embotelladora Andina y director de Scotiabank Chile, empleo y productividad.
- ¿Qué le parece el resultado?
- El resultado de la elección entrega una señal clara de la ciudadanía. No solo por la gran diferencia de votos, sino también por el bajo nivel de sufragios nulos y blancos, que refleja una decisión mayoritariamente informada y una voluntad explícita de optar por un rumbo definido para el país. Eso es valioso en un contexto donde Chile viene de años de incertidumbre y fragmentación.
- ¿Qué espera del próximo Gobierno?
- Dicho lo anterior, no hay espacio para triunfalismos. Esperamos que el próximo Gobierno lea este mandato con responsabilidad, humildad y sentido de futuro. Chile necesita volver a poner el foco en el desarrollo, en la creación de oportunidades y en la reconstrucción de confianzas. Eso exige liderazgo, apertura al diálogo y una agenda que combine crecimiento económico y seguridad.
- ¿Este resultado permitirá mejorar el clima de negocios en el país?
- Cerrar procesos electorales despeja una parte importante de la incertidumbre política, y eso siempre es una buena noticia para la inversión. El hecho de que exista una definición clara, con amplio respaldo ciudadano y pocos votos de rechazo o desafección, genera una base más sólida para mirar el futuro con mayor confianza.
Sin embargo, la mejora del clima de negocios no ocurre de manera automática. Va a depender de las señales tempranas y concretas que entregue el nuevo Gobierno en materias clave como estabilidad regulatoria, certeza jurídica, seguridad y una agenda pro inversión coherente. Si esas señales son claras y consistentes, Chile tiene todas las condiciones para volver a atraer capital, destrabar proyectos y dinamizar el empleo.