FT Español

Presupuesto de Japón presenta una prueba de credibilidad para Noda

El presupuesto 2012 podría tener grandes implicancias para la confianza a largo plazo en la capacidad de Japón para restaurar la sostenibilidad fiscal.

Por: | Publicado: Jueves 29 de diciembre de 2011 a las 05:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Por Mure Dickie en Tokio
Incluso para los malos estándares fiscales internacionales de hoy en día, el presupuesto de Japón para el año fiscal que comienza el 1 de abril tiene una lectura tenebrosa. Por cuarto año consecutivo, los ingresos por emisión de bonos debieran exceder a la recaudación por impuestos: se espera que la deuda vigente del gobierno llegue a unos extraordinarios 937 billones (millones de millones) de yenes (US$ 12 billones).

El gobierno ha logrado mantener los planes del gasto general en 90 billones de yenes, un poco menos del nivel inicial presupuestado para el actual año fiscal, pero sólo separando una cuenta especial de 3,8 billones de yenes para la reconstrucción del desastre y suscribiendo 2,6 billones en deudas para fondos de pensiones públicas.

Eso no significa que el colapso fiscal sea inminente en la tercera economía del mundo. A diferencia de las víctimas de la crisis fiscal soberana de Europa, Japón aún puede tranquilamente financiar su deuda estatal con sus enormes ahorros. El rendimiento de los bonos del gobierno a 10 años fue sólo 0,995% ayer.

Pero el presupuesto 2012 podría tener grandes implicancias para la confianza a largo plazo en la capacidad de Japón para restaurar la sostenibilidad fiscal y, más inmediatamente, para la credibilidad de la administración de cuatro meses de antigüedad del primer ministro, Yoshihiko Noda. Los críticos se han aprovechado de su aprobación de proyectos públicos anticuados, incluyendo líneas férreas de rápida velocidad y retomar un proyecto hidroeléctrico que alguna vez los gobernantes demócratas prometieron exterminar.

Los oficiales usaron “todos los trucos contables en el libro”, dijo Asahi Shimbun, un diario de izquierda en una editorial. “La pronunciada falta de urgencia del gobierno japonés es vergonzosa a la luz de la crisis de deuda europea en desarrollo”.

Otros han sido menos gentiles. Para el bloguero japonés de política, Michael Cucek, la represa, otros gastos y adoptar otro presupuesto rico en deudas, demostró que Noda está haciendo espacio para todos los deseos ministeriales de gastos, y el primer ministro no “es un negociador ágil, sino una arrastrada babosa marina”.

Los comentarios podrían tener menos efecto si Noda, un ex ministro de Finanzas conocido como un relativamente conservador fiscal, estuviera haciendo un claro progreso en sus esfuerzos por elevar la recaudación de impuestos, que declinó como proporción del PIB de 21% en 1991 a 17% en 2008.

Pero la herramiento favorecida de Noda, duplicar el impuesto de consumo de 5% a mitad de la década, enfrenta oposición. Muchos miembros del partido gobernante ven tal alza como la receta de un futuro desastre electoral. Nueve miembros parlamentarios del Partido Democrático de Japón (DPJ, su sigla en inglés) anunciaron esta semana que renunciarían al partido por este conflicto y otras disputas.

Lo más leído