S&P recorta nota de entidades de EEUU y Moody’s alerta sobre futura rebaja
La división entre republicanos y demócratas en el Congreso, la que puso al país al borde de la suspensión de pagos, es uno de los motivos que esgrimen las agencias para sus decisiones.
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Las agencias no dan respiro a EEUU. Luego del anuncio de S&P de la rebaja de la calificación de deuda del viernes, Moody’s alertó que podría rebajar la nota de la deuda soberana estadounidense antes de 2013 si el gobierno no logra adoptar nuevas medidas para una mayor reducción del déficit público. A esto se sumó la decisión de ayer de S&P de recortar la nota de una serie de entidades debido a que dependen en gran medida de la situación fiscal de EEUU.
Moody’s señaló que el actual nivel de endeudamiento del país (100 % del PIB, la cifra más alta desde la Segunda Guerra Mundial) debe reducirse si EEUU quiere mantener la calificación AAA. “Para mantener la calificación AAA, quisiéramos ver medidas adicionales que traigan como resultado que a mediados de la década la proporción de la deuda pública respecto al Producto Interno Bruto (PIB) no quede lejos del nivel de casi 75% inicialmente previsto para 2012, y luego vaya descendiendo a largo plazo”, dijo en un informe el analista de Moody’s, Stephen Hess.
Ayer, la agencia corroboró que mantendría su máxima nota para la deuda soberana de EEUU, pero con “perspectiva negativa” por la división entre republicanos y demócratas en el Congreso, que puso al país al borde de la suspensión de pagos.
La agencia Fitch, por su parte, precisó que aún mantiene abierto el proceso de revisión del rating de EEUU, que actualmente cuenta con la máxima calificación, y recordó que esta revisión concluye “a fines de agosto”. Fitch señala que este proceso se centrará en los fundamentos crediticios soberanos en comparación con otros emisores que cuentan con la misma calificación que el país, así como en sus perspectivas fiscales y económicas en el mediano plazo teniendo en cuenta los acuerdos del 2 de agosto, señala el diario Expansión.
S&P en picada
A estos anuncios se sumó nuevamente S&P, la que señaló que hay 33% de probabilidad de que se aplique un nuevo recorte a la calificación de deuda estadounidense en los próximos seis a 24 meses.
Y como la calificación de la nación fue rebajada, la agencia debe continuar haciendo lo mismo con aquellas entidades que están vinculadas con la deuda estadounidense a largo plazo, como los gigantes hipotecarios Fannie Mae y Freddie Mac cuyas obligaciones tienen “dependencia directa” del gobierno federal. A estos se le agregan la deuda senior de diez de los doce Bancos Federales de Préstamos para Viviendas, que pasaron de AAA a AA+.
La calificadora advirtió, además, que estaba en proceso se reducir los grados de inversión de una serie de instituciones financieras, munipalidades y de gobiernos locales respaldados por la deuda estadounidense.
“Nuestra opinión sobre las características de crédito fundamentales de las compañías no ha cambiado”, comentó la agencia en un comunicado. Berkshire Hathaway, el vehículo inversionista del multimillonario Warren Buffet, mantuvo su AA+, pero su perspectiva fue recortada de “estable” a “negativa”. Además, New York Life Insurance fue una de las seis aseguradoras que ayer vieron perder su AAA para quedar en AA+.
Los analistas aún no tienen muy claro cuál será el impacto a largo plazo de la pérdida de triple A. Sin embargo, en el corto plazo “con la enorme liquidez que hay en el sistema y la gran profundidad que tiene el mercado de bonos soberanos y agencias en menor medida, es improbable que veamos ventas masivas sólo por el efecto de baja en clasificación”, comentó a DF el gerente de inversiones de GlobalFolio, Manuel Pereyra.