El consejero delegado de Santander ha adelantado hoy que no cree que el banco cambiará este ejercicio su política de pagar el dividendo en acciones. Asegura que el grupo ha terminado de fortalecerse y ahora el objetivo es la rentabilidad.
Javier Marín ha afirmado hoy, en la presentación de los resultados de 2013 a los analistas, que no prevé cambios en la politica de retribución al accionista del banco.
El consejero delegado ha reiterado que son el Consejo y la Junta quien decide sobre el dividendo, pero ha adelantado que no se prevén modificaciones: el grupo seguirá con el script dividend, que permite al accionista elegir si quiere recibir efectivo o acciones.
Marín también ha defendido que Santander está "muy cómodo" con su situación de capital y liquidez "y su capacidad de generarlo de forma orgánica". El banquero ha insistido en que el objetivo del grupo es alcanzar un nivel de coreTier1 con Basilea III fully loaded (es decir, aplicando todas las deducciones que se tendrán que introducir hasta 2019) superior al 9% para finales de este ejercicio.
De hecho, el número dos del banco ha insistido en que en 2013 el grupo ha terminado con su esfuerzo para reforzar el balance, tanto en capital, como en provisiones y en liquidez. A partir de este ejercicio, el foco está en la búsqueda de una mayor rentabilidad.
Para hacerlo, Santander ha puesto en marcha una transformación de sus procesos comerciales, con el objetivo de incrementar la multicanalidad, facilitar la contratación de productos y gestionar mejor los recursos humanos. En cambio, el banco no tiene previsto realizar más desinversiones de activos.
Resultados
El consenso del mercado atribuía a Santander una ganancia de unos 4.700 millones de euros, que el banco no consiguió alcanzar por el efecto del tipo de cambio de las monedas latinoamericas y el dólar con el euro. A tipo de cambio constante, el beneficio habría subido un 137%, según la entidad.
El mayor grupo bancario español obtuvo un margen de interés, que recoge los ingresos más estrictamente financieros, de 25.935 millones, el 13,3% menos que el año anterior.
Las comisiones caen un 5%, pero los resultados por operaciones financieras (ROF) compensan parcialmente el descenso, con un alza del 35%, lo que lleva al margen bruto (los ingresos totales) a disminuir un 8,4%, hasta los 43.406 millones. El efecto del tipo de cambio se nota también en los costes, que bajan el 0,7%. En euros constantes, habrían subido el 5%.
Las dotaciones para las insolvencias bajan el 14% frente al año anterior, cuando la necesidad de saneamiento del ladrillo en España disparó las provisiones. En 2013, restaron al resultado 10.863 millones. También aumenta el porcentaje de beneficio que Santander tiene que distribuir entre los accionistas minoritarios, después de las salidas a bolsa de sus filiales en México y Chile.
A lo largo de 2013, Santander ha obtenido 939 millones de euros netos de plusvalías por la venta de los seguros en España y de la gestora. Todos los extraordinarios se han dedicado a provisiones y a pagar los costes de las integraciones en España y en Polonia. Las plusvalías de la salida de Bolsa de Santander Consumer Usa y de la venta de Altamira, por un total de 1.125 millones, se materializarán en las cuentas de 2014.