Wall Street se fue a números rojos y la Bolsa de Santiago interrumpió su escalada este jueves, después de que la información entregada por dos bancos regionales de Estados Unidos aumentara las preocupaciones sobre la calidad del crédito en la primera economía del mundo.
Las alzas matinales se revirtieron, con lo que el Dow Jones cayó 0,7%, el S&P 500 0,6% y el Nasdaq 0,5% al cierre de la Bolsa de Nueva York. El índice KBW de acciones bancarias perdió 3,6% y el Russell 2000 de empresas small cap retrocedió 2,2%.
En Chile, el S&P IPSA borró por completo su fuerte alza de la mañana, y cerró sin cambios en 9.112,15 puntos. El índice venía de acumular un avance de 5% en tres jornadas consecutivas de ganancias esta semana.
"El IPSA estaba por cuarta jornada consecutiva tranzando al alza, llegando en un momento del día a los 9.200 puntos, niveles que no se veían desde comienzos de septiembre. Sin embargo, luego que dos bancos regionales presentaron problemas financieros por créditos incobrables, el índice comenzó a declinar, quedando sin mejoras significativas", dijo a DF el portfolio manager de Acciones Chilenas en Zurich AGF, José Agustín Cristi.
El rendimiento del Tesoro de EEUU a dos años se hundió a mínimos desde septiembre de 2022 y el oro spot saltó a nuevos máximos históricos. Bonos y lingotes se beneficiaron en desmedro del dólar, que cayó tanto en Chile como frente a una canasta de pares globales frente a las nuevas expectativas de tasas de interés.
En documentos enviados a la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, sigla en inglés), Zions Bancorp (-13,1%) reveló una amortización de US$ 50 millones por un préstamo comercial impago suscrito por su filial California Bank & Trust, y Western Alliance Bancorp (-10,8%) anunció que está negociando con un prestatario que no ha "aportado garantías hipotecarias en primera posición".
Esto trajo a la primera línea las preocupaciones generadas recientemente por la quiebra de First Brands, un fabricante de autopartes principalmente financiado mediante crédito privado, hecho que siguió a la bancarrota de Tricolor Holdings. El banco Jefferies (-10,6%), expuesto a First Brands, también se desplomó.
Antes de los hechos
Cristi rescató que "a pesar de esto, durante la semana el desempeño del IPSA ha sido positivo por factores externos", y subrayó que "el factor más importante que fundamenta este rally local son las mejores expectativas económicas en el país por el posible cambio en las fuerzas políticas. Esto se basa en que las acciones que más han subido estos últimos días son los bancos, operadores de malls y constructoras, que son las más ligadas al ciclo económico interno".
Desde temprano había un trasfondo importante relacionado con la política monetaria flexible, ya que las últimas declaraciones del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, reforzaron previamente esta semana las expectativas de que el banco central está decidido a seguir bajando las tasas, aún en medio de la sequía de datos oficiales que supone el cierre del gobierno federal.
La renta variable en general venía beneficiada por estas expectativas de recortes de tasas en un ambiente controlado. De hecho, Europa no alcanzó a ver las reacciones a las noticias sobre la banca regional de EEUU, y el continental Euro Stoxx 50 avanzó 0,8% y el FTSE 100 de Londres subió 0,1% al cierre de la sesión.
Previamente, el japonés Nikkei cerró con un alza de 1,3% para acercarse a retomar máximos históricos. El CSI 300 de China continental ganó 0,3%, mientras que el Hang Seng de Hong Kong no tuvo cambios.
Los últimos resultados de empresas habían contribuido al apetito por riesgo. La taiwanesa TSMC venció los pronósticos con sus utilidades del tercer trimestre y elevó sus estimaciones de ingresos reportando una mayor demanda desde el sector de IA.
Esto alimentó una temporada de resultados que también ha traído buenas noticias desde el sector financiero estadounidense, primero con los resultados de cuatro grandes bancos el martes, y luego el miércoles con Bank of America y Morgan Stanley.
Y se reforzó con el hecho de que los inversionistas se sintieron algo más esperanzados de que la guerra comercial entre Washington y Beijing llegue a una resolución o, por lo menos, reduzca su intensidad. El secretario del Tesoro, Scott Bessent, abrió la puerta a extender la tregua arancelaria entre ambas potencias, si es que China se compromete a postergar sus restricciones a la exportación de tierras raras.