El banco español BBVA cerró el primer trimestre con un
beneficio, sin extraordinarios, de 1.442 millones de euros (unos US$ 2.235
millones), un 14,9% más que el año anterior, y ligeramente por encima de lo
previsto. La tasa de morosidad repuntó al 0,99%, mientras que la de cobertura
es del 200%.
"En un periodo de incertidumbre e inestabilidad
internacional", según resalta BBVA en su nota, los beneficios del grupo
sumaron 1.951 millones de euros incluyendo los 509 millones de plusvalías netas
por la venta de Bradesco. Estas plusvalías fueron 187 millones inferiores a las
logradas un año antes con Iberdrola.
El margen de intermediación experimentó un crecimiento del
22,4%, y un 14,9% en el margen de explotación, que se elevaría al 21,6% en términos
de euros constantes.
En el primer trimestre, el beneficio por acción sin
singulares crece un 9,6%, la rentabilidad sobre recursos propios (ROE) se sitúa
en el 25,2% y la rentabilidad sobre activos (ROA) se eleva al 1,24%. Con
singulares, el ROE es del 27,4% y el ROA del 1,35%, con contribución positiva
de todas las áreas.