El Nikkei, principal indicador de la bolsa de Tokio, recuperó
hoy la barrera de los 8.000 puntos que perdió en la sesión precedente, al
anotarse un alza de 1,89%. En concreto cerró en 8.051 unidades, pese a la falta
de datos positivos. Es más, tuvo que hacer frente a un desplome de su superávit
comercial del 80% y a malos datos empresariales, como los de Sony y a la
decisión del Banco de Japón de mantener los tipos en el 0,1%.
Sin ninguna referencia de favorable calado, el selectivo nipón
ha logrado rebotar un 1,89%, hasta los 8.051 enteros, recuperando así la cota
de los 8.000 puntos que perdió ayer.
Todo, pese al dato que se ha conocido relativo al superávit
comercial de Japón, que se desplomó un 80% en 2008, hasta 2,16 billones de yenes
(US$ 24.288 millones). Las exportaciones bajaron el año pasado el 3,4%
interanual, hasta los 81,05 billones de yenes, mientras que las importaciones
ganaron el 7,9% respecto a 2007, hasta los 78,89 billones de yenes. La balanza
comercial nipona también entró en números rojos en enero, agosto, octubre y
noviembre durante el pasado 2008 de crisis económica, pero lo habitual en los
últimos fue el superávit.
Otra de las referencias más esperadas de esta jornada ha
sido la conclusión de la reunión del Banco de Japón que dio comienzo ayer y que
se ha saldado sin movimientos en el precio del dinero, que se mantiene en el
0,1%, después de que en diciembre acometiera una bajada desde el 0,3%.
Sin embargo, este organismo hizo pública una información de
mayor calado, la de su rebaja de las previsiones de crecimiento de la segunda
economía mundial, al asegurar que el Producto Interior Bruto (PIB) de Japón se
contraerá un 1,8% al término del año fiscal 2008, que finaliza en marzo de
2009.