Por sexta sesión consecutiva los mercados europeos se situaron en el terreno de las ganancias, en una jornada en la que ignoraron la rebaja de
calificación de Portugal por parte de Moody's, pero en la que estuvieron impulsadas por la apertura en positivo de Wall Street.
Fue el FTSE
100 de Londres el que lideró los avances, con un alza de 2,01% que
lo llevó hasta los 5.271,02
puntos.
Mientras, el DAX de Frankfurt registró una expansión 1,87%
hasta las
6.191,13 unidades, y el CAC 40 de París de 1,96% hasta los 3.637,76
puntos. Por su parte, el Ibex 35 de Madrid terminó hoy con un incremento de 2,00% y 10.259,50
puntos.
Algunos retrocesos registraron los parqués después
de que la agencia Moody's rebajase la calificación de la deuda
soberana portuguesa de "Aa1" hasta "A1" con perspectiva "estable".
Al
respecto, el gobierno portugués indicó que Moody's, al
calificar como "estable" sus perspectivas, ha dado "una señal de
confianza" a los planes del Gobierno.
Pese a esta decisión de la
agencia de calificación, las bolsas
mantuvieron su tendencia alcista, ya que confiaban en la apertura en
positivo del mercado de Nueva York, después de la compañía Alcoa
-que inauguró la temporada de resultados- presentará ayer unos
resultados trimestrales más favorables de lo que se esperaba.
Y
eso pese a que el déficit comercial de EE.UU. creció,
inesperadamente, un 4,8% en mayo y llegó a los US$ 42.300 millones.
También animó a las bolsas europeas el logro del gobierno griego,
que hoy colocó 1.625 millones de euros en una emisión de bonos del
tesoro a seis meses.