El primero en causar un terremoto político en la izquierda fue el que inhabilitó la candidatura a diputado del dirigente comunista Daniel Jadue, quien buscaba un cupo por el Distrito 9. Sólo días más tarde, el Tricel provocó otro terremoto político, esta vez en las filas de la centroderecha: Ximena Rincón -sentenció el tribunal- no podrá competir por un cupo senatorial en la Región del Maule, acogiendo un requerimiento del oficialismo que argumentaba que Rincón ha ejercido su cargo de parlamentaria por dos períodos consecutivos, lo que le impide postular a un tercer período.
Como si lo anterior fuera poco, el Tricel asestó otro golpe el martes pasado. ¿La protagonista? La exalcaldesa Cathy Barriga. El tribunal resolvió ratificar su inhabilidad para ejercer cargos públicos por un período de cinco años.
Con todo lo anterior, muchos comenzaron a preguntarse qué es realmente el Tricel; cómo opera y quiénes lo componen. A punto de cumplir 100 años desde su creación -en la Constitución del año 1925-, este tribunal es el encargado de calificar y validar los resultados de una determinada elección popular. También debe resolver reclamos electorales y fallar sobre apelaciones o denuncias; y proclamar a quienes resulten electos.
Está compuesto por cinco miembros que se eligen por sorteo. Uno de ellos debe haber desempeñado el cargo de presidente o vicepresidente de la Cámara de Diputados o del Senado por más de un año; y los otros cuatro deben ser ministros de la Corte Suprema.
Actualmente -y hasta el año 2028- la corte está presidida por el juez Arturo Prado Puga, quien fue nominado por la exPresidenta Michelle Bachelet y es conocido por su cercanía con el mundo empresarial (trabajó como abogado en el Banco BCI por más de 40 años). A él le tocó dirimir tanto en el caso de Jadue como de Rincón -pues la votación estaba empatada entre los miembros del tribunal-, dejando a ambos fuera de la carrera parlamentaria. El resto de los miembros son los jueces Mauricio Silva Cancino, Adelita Ravanales Arriagada y Maria Cristina Gajardo Harboe, y el exdiputado DC, Gabriel Ascencio Mansilla.
Los ministros normalmente se reúnen una vez a la semana (todos los martes) para revisar los asuntos pendientes aunque en tiempos agitados -como este- suelen hacerlo más seguido. Según comentaron a DF MAS quienes conocen el trabajo al interior del Tribunal, ahora vendrá un período de más tranquilidad que se terminará el 16 de noviembre, cuando deberán ratificar no sólo los resultados de la primera vuelta presidencial sino también de las parlamentarias.