Tras la promulgación del proyecto de ley que crea el nuevo Ministerio de Seguridad Pública, actores políticos han fijado posición sobre los alcances y falencias de la nueva cartera.
Durante una entrevista en Radio Cooperativa, el subsecretario del Interior, Luis Cordero, precisó que la creación del nuevo ministerio apunta a “tener un sector especializado en materia de seguridad e implementar un nuevo modelo de gestión pública en la materia”.
Sin embargo, aclaró que las policías seguirán acopladas a estructuras nacionales.
Al ser consultado sobre su posible nombramiento como ministro de Seguridad, Cordero indicó que “quedan todavía semanas y meses para definirlo”.
En la misma línea, explicó que “habiendo promulgado el proyecto de ley, vienen la dictación de decretos con fuerza de ley (...). El Ministerio del Interior tiene que separar funcionarios que van al Ministerio de Seguridad”, agregó.
Por lo tanto, una vez que la Contraloría tome razón de los decretos de ley, se podrán nombrar a las autoridades a cargo de la cartera.
Durante otra entrevista en Radio Pauta, el exsubsecretario del Interior, Felipe Harboe, se refirió a la ausencia de acuerdo político para que el Ministerio de Seguridad se ocupe de la inteligencia.
“La agencia de inteligencia va a quedar dependiendo del Ministerio del Interior, lo cual es un despropósito completo. El ministro de Seguridad tiene que tener la herramienta de la inteligencia (...). Un ministro de Seguridad sin ser el responsable de la inteligencia evidentemente tiene un vacío; sobre todo considerando que la realidad de Chile demanda hoy día un sistema de inteligencia muy vinculado a los temas de crimen organizado”, advirtió en la conversación.