Economía y Política

Desaceleración, el factor clave de Hacienda para apurar un apoyo más transversal

El débil crecimiento de la economía a mayo (2,3%) fue gravitante para que el gobierno buscara zanjar un acuerdo con la oposición.

Por: | Publicado: Miércoles 9 de julio de 2014 a las 05:00 hrs.
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Carlos Alonso M



“La economía irá de menos a más”. Ese ha sido hasta ahora el discurso que el gobierno ha entregado cada vez que se conocen las cifras de crecimiento económico. Sin embargo, ese discurso todavía no se ha traducido a los hechos. A mayo la actividad acumula una expansión de 2,5% y las expectativas del mercado se acercan a 3%, aunque otros analistas no descartan que el Producto Interno Bruto se acerque a 2,5%.

Este nuevo escenario de una desaceleración más profunda comenzó a jugar un rol principal en la mayor apertura que el ministro de Hacienda, Alberto Arenas, exhibió -junto a su equipo económico- para enfrentar el segundo tiempo de la reforma tributaria. De esta manera, en Teatinos 120 se estableció como prioridad lograr un acuerdo lo más amplio posible, incluyendo a los partidos de oposición para zanjar el debate tributario, y terminar con la incertidumbre que generaría para la economía, el extender en demasía el debate tributario y a la vez, no conseguir un respaldo más allá de la Nueva Mayoría.

Desde el gobierno aseguran que el magro escenario que se vislumbraba para el resto del año fue un factor decisivo para que Arenas mostrara una faceta distinta a la que presentó durante la discusión en la Cámara de Diputados. Es así como al partir junio comenzó a acercar posiciones con los senadores de Renovación Nacional (RN) y de la Unión Demócrata Independiente (UDI).

Según conocedores del proceso, Hacienda también quiso acelerar el proceso de acuerdo para comenzar a impulsar políticas destinadas a atenuar el menor crecimiento, ya que era prioridad para el Ejecutivo contar con la reforma tributaria para la elaboración del Presupuesto 2015, escenario que se estaba poniendo en riesgo de no mediar cambios sustantivos al proyectos de ley, pero con la condición de mantener una recaudación de 3,02% del PIB, unos 
US$ 8.200 millones.

Durante el encuentro con los economistas que conforman el Comité del PIB tendencial el Ejecutivo habría transparentado su preocupación por la acentuada desaceleración de la actividad. Un cercano a esa instancia asegura que “Hacienda está preocupado por los datos de Imacec, consumo y demanda, por lo que acelerar el trámite de la reforma era una prioridad para ellos”.

El académico de la Universidad de Chile Joseph Ramos comentó que la desaceleración debe ser factor determinante para que el gobierno buscara un acuerdo amplio para disipar la incertidumbre que ha generado la reforma. “Cualquier acuerdo tributario que respete la recaudación de los US$ 8.200 millones sería muy importante para dar una señal potente al mercado”.

PIB a la baja


El lunes próximo el director de Presupuestos, Sergio Granados, asistirá a la Comisión Mixta de Presupuestos para presentar una actualización del Estado de las Finanzas Públicas y las proyecciones de ingresos y gastos comprometidos para 2014.

La proyección que expuso el gobierno en mayo suponía que este año el PIB crecería 3,4% (4,9% en el Presupuesto), que la demanda interna se expandiría 3,1% (5,4% en el Presupuesto) y que el precio del cobre sería US$ 3,05 la libra (US$ 3,25 en el Presupuesto). Sin embargo, en el Informe de Política Monetaria (IPoM) de junio, el Banco Central proyectó un cuadro aún más negativo y más cercano al consenso de mercado que al delineado por el oficialismo, estimando que este año la economía en un rango entre 3,5% y 2,5%, mientras que la demanda interna aumentaría solo 1,7%. 
Esto indica que la Dipres corregirá a la baja de nuevo el PIB efectivo, situándolo en el centro del rango del banco, es decir, 3% y una demanda de 1,7%. Un informe de BBVA sostiene que esto repercutiría en menores ingresos para el fisco en 2014 de unos 
US$ 2.370 millones.

El lunes también se espera que el gobierno diga si para financiar estos menores recursos recurrirá a fondos soberanos o bonos. Para BBVA no debe descartarse la opción de emitir más deuda “dado el alto apetito por este tipo de papeles soberanos y las necesidades estructurales por deuda soberana del mercado”.

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