Algunos de los sellos del proyecto de ley de Presupuestos 2017, que ingresó el viernes a trámite a la Cámara de Diputados, es la austeridad, la prudencia y el apego a la regla fiscal, conceptos que repitieron en varias oportunidades la presidenta de la República, Michelle Bachelet, y el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, al revelar los ejes del proyecto la semana pasada.
Responsabilidad en el manejo de las finanzas públicas que se refleja en que el gasto anotará su expansión más baja en los últimos 14 años, al avanzar apenas un 2,7%. Si bien la cifra es acotada, lo cierto es que viene a consolidar una tendencia que se manifestó ya en el erario de este año, el primero del ministro Valdés como jefe del equipo económico, y que es más evidente al analizar la historia reciente.
En concreto, en 2017 la mayoría de los ministerios crecerán por debajo (y algunos inclusive la mitad) del promedio histórico de los últimos 15 años. Un informe de la Dirección de Presupuestos (Dipres) de julio reveló las principales tendencias del gasto entre 2001 y 2015, datos que al cruzarlos con el crecimiento del erario en los últimos dos años revela la marcada desaceleración de la expansión del sector público.
Por ejemplo, entre los ministerios con mayor peso en el gasto total, Educación exhibirá un aumento de 6,2% el próximo año, cifra inferior al 7,5% de 2016 y al 8% promedio entre 2001 y 2015. En 2017, el gasto se concentrará en el fortalecimiento de la cobertura a nivel parvulario, la entrada en vigencia de la nueva carrera docente, continuar con el fin del copago y aumentar la cobertura de la gratuidad en la educación superior, entre otras prioridades.
En Salud, el gasto avanzará 4,8% el ejercicio venidero, lo que se contrasta con el 5,1% de 2016 y aún más con el 9% de alza observada en la última década. ¿Cómo se gastará el dinero? Se sumarán 46 nuevos establecimientos, como servicios de urgencia de alta resolutividad, mejorar y ampliar las prestaciones asociadas al GES y continuar el plan de inversiones a nivel hospitalario, por citar algunos objetivos.
La desaceleración es más fuerte al analizar las cifras del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, el tercer eje que definió la Presidenta como prioritario entre los desembolsos del Fisco el próximo año. Como un todo, la repartición liderada por Mario Fernández aumentará su gasto en 1,5% el próximo año, ocho décimas por debajo de lo que se espera que crezca este año y lejos del 14% promedio entre 2001 y 2015.
En Obras Públicas, el gasto como un todo se contraerá 2,9%, dejando atrás la variación de 2,9% de 2016 y el avance de 7% promedio anotado en la última década y media. Trabajo y Previsión Social, en tanto, mantiene casi inalterado su gasto global entre 2016 y 2017, con avances de 1,7% y 1,8%, respectivamente, datos que se ubican lejos del alza de 4% promedio del período 2001-2015.
“La economía chilena se encuentra en un ciclo de desaceleración, razón por la que el diseño del proyecto de ley de Presupuestos apunta a un crecimiento moderado del gasto para garantizar la sostenibilidad de las cuentas fiscales”, recalcó el viernes Valdés ante la prensa, acompañado del director de la Dipres, Sergio Granados.
“Castigo” en algunas carteras
Una de las demandas de los parlamentarios de la Nueva Mayoría durante el trabajo prelegislativo, fue que Teatinos 120 considerara reasignar recursos o derechamente recortar gasto en los ministerios con menor nivel de ejecución, apuntando a la reducción en las platas para contratación en personal, por citar algunos ejemplos.
Y si bien el detalle de las reasignaciones de gasto se conocerían recién esta semana, cuando Granados y Valdés asistan al Congreso a exponer el Informe de Finanzas Públicas y el Estado de la Hacienda Pública, respectivamente, lo cierto es que el proyecto de alguna manera “castigó” a algunos de los ministerios con menor ejecución.
En concreto, Hacienda redujo los fondos en tres de las seis secretarías de Estado que a julio (último dato desagregado disponible) tenían un nivel de ejecución por debajo del 50%. El principal damnificado fue el Ministerio del Deporte, cuyo gasto se redujo en 5,4% para el próximo año. A julio, acumula una ejecución de apenas 43,5%, siendo la segunda repartición más atrasada después de la Secretaría General de Gobierno (Segegob). Precisamente, la cartera liderada por Marcelo Díaz (41,6% de gasto al séptimo mes del año) registró una baja de 1,7% en sus recursos para el próximo ejercicio.
En tanto que Obras Públicas, reducirá en 2,9% su presupuesto total para 2017, en vista de un desembolso a julio que asciende a 48,6% de su erario. Eso sí, Valdés explicó el viernes que esta baja se debe a una transferencia que debe realizarse a Metro este año. “Si uno excluye eso, el MOP crece algo por encima de 3%”, dijo el ministro.
Mientras que el resto de las carteras con ejecución por debajo del 50% anotarán expansiones en en 2017: este es el caso del Ministerio de la Mujer y Economía, mientras que Transportes anotará un avance de 0,3%.
