El estatal Banco do Brasil (BB) anunció
hoy la compra por US$2.251 millones del regional Nossa Caixa, controlado por el Gobierno del
estado de Sao Paulo, en una operación facilitada por las nuevas
medidas adoptadas por el Ejecutivo para afrontar la crisis global.
El BB detalló en un comunicado a la Comisión de Valores
Mobiliarios (CVM), reguladora de las empresas que cotizan en la
bolsa de Sao Paulo, que el pago será realizado en 18 cuotas de US$125,1 millones, corregidas por
la tasa básica de intereses Selic, que está en 13,75% anual.
"El valor de la operación fue calculado con base en una
evaluación económico-financiera elaborada por consultores
contratados por el Banco do Brasil, con metodologías para establecer
las perspectivas de rentabilidad futura y flujo de caja de Nossa
Caixa", apuntó.
El ministro de Hacienda, Guido Mántega, señaló que el negocio "equilibra el juego", pues después de la fusión de
los bancos privados Itaú y Unibanco, el BB "se vuelve ahora más
competitivo. Ahora está entre los 20 mayores del mundo".
"Vimos que es importante, en un momento de crisis financiera como
este, tener bancos públicos fuertes e importantes", agregó el
titular de la cartera económica brasileña.
Los servicios de Nossa Caixa y la operación de programas sociales
de la entidad bancaria en las ciudades del estado de Sao Paulo se
mantendrán, sostuvo el comunicado del BB.
Antes del anuncio, estuvieron hoy reunidos en Brasilia el
presidente Luiz Inácio Lula da Silva y el gobernador de Sao Paulo,
José Serra.
Antes de la adquisición de Nossa Caixa, el BB había incorporado a
los bancos regionales Besc, de Santa catarina, y BP, de Piauí, para
sumar así con los tres negocios activos por US$223.430 millones.
La institución evalúa también la compra del Banco do Brasilia
(BRB) y parte del privado Votorantim.
Los negocios, sin embargo, no superan el liderazgo alcanzado por
la fusión de los bancos privados Itaú y Unibanco, que a comienzos
del mes consolidaron la mayor institución bancaria de Latinoamérica,
con activos por US$240.587 millones.
La compra de Nossa Caixa fue facilitada por un decreto
presidencial que autoriza a los bancos federales BB y Caixa
Económica para adquirir participaciones en otras instituciones
púbicas y privadas en dificultades, medida adoptada para garantizar
el crédito en Brasil ante la crisis financiera internacional.
En el tercer trimestre, el BB obtuvo un beneficio neto de US$781,1 millones, 36,9%
más que en el mismo período de 2007.
Nossa Caixa, en tanto, reportó ganancias por US$29,2 millones entre julio y septiembre
pasados, frente a las pérdidas por US$28,4 millones en esos mismos meses el año anterior.