Tras años de estudios en laboratorio, la compañía Profund, fundada en 1983 en la Región del Biobío, desarrolló una tecnología que utiliza escorias y relaves mineros como material principal en la construcción de pavimentos. En 2024, la firma liderada por Carlos Guzmán se asoció con Anglo American, que ha suministrado los materiales para la pavimentación de 1.700 m2 de plataforma en la Fundición Chagres y 500 metros de camino en la planta Las Tórtolas, ambas propiedad de la minera.
“Este proyecto marca un antes y un después. Un desecho minero pasa a transformarse en un recurso valioso. A futuro, esta tecnología podría aplicarse en obras de infraestructura vial pública”, sostuvo el director general de Obras Públicas del MOP, Boris Olguín. Según mediciones hechas por la firma R&Q Ingeniería, el pavimento desarrollado genera hasta tres veces menos de emisiones que los tradicionales.