Un conflicto sindical paralizó hoy a
cinco de las seis líneas del metro de Buenos Aires y desató un caos
en el transporte de la capital argentina por la falta de un servicio
que usan a diario unas 700.000 personas.
Los trabajadores cesaron sus actividades a poco de comenzar la
jornada en protesta porque "un sector" de su sindicato "forzó una
elección de delegados para el personal de limpieza y el auxiliar,
violando el estatuto", explicó Jorge Méndez, representante sindical
de una de las líneas del metro.
Méndez afirmó a la radio bonaerense Continental que "además actuó
"una patota (banda) de gente armada, por lo que no están dadas las
condiciones de seguridad que garanticen el trabajo" de los empleados
del metro.
El paro hizo colapsar el servicio de taxis, congestionó el de
autobuses y desató un caos en el tránsito en torno a las grandes
terminales de transporte de la capital argentina, a donde a diario
viajan unos cinco millones de personas a sus trabajos.
"Como consecuencia de un conflicto interno dentro del gremio
Unión Tranviaria Automotor (UTA), que reúne a los trabajadores, está
paralizado el servicio" en cinco de las seis líneas del metro,
señaló Metrovías, la empresa que gestiona el servicio.
"Lamentamos los inconvenientes que pudieran sufrir los
trabajadores por esta medida gremial", concluyó la empresa en un
comunicado.