China y Taiwán dieron hoy vuelta a la página a
sesenta años de enfrentamientos, batallas diplomáticas y hostilidad
mutua, con la firma de un acuerdo de libre comercio que marcará un
antes y un después en la relación entre el régimen comunista y la
"isla rebelde".
Delegaciones de China y Taiwán
firmaron hoy en la ciudad central china de Chongqing el Acuerdo
Marco de Cooperación Económica (AMCE).
La firma de hoy y los dos años de negociaciones previas no han
sido llevadas a cabo por los Gobierno de ambos países -que no
aceptan relaciones de Estado a Estado- sino por dos organizaciones
no gubernamentales que representan a uno ante el otro.
De esta forma, el tratado fue firmado por los
presidentes de la china Asociación
para las Relaciones a través del Estrecho (ARATS) y la taiwanesa
Fundación Intercambios del Estrecho, que desde hace más de 15 años
conducen las negociaciones entre ambos territorios.
El acuerdo reducirá aranceles a 539
artículos taiwaneses en el mercado chino (lo que ahorrará US$13.800
millones a Taiwán) y a 239 importadas de China a la isla
(un beneficio de unos US$ 2.860 millones para los chinos).
La industria petroquímica, la de maquinaria, el textil, los
servicios no financieros (auditorías, hospitales, mantenimiento de
aviones, I+D) son algunos de los sectores que según los expertos
resultan más beneficiados por el acuerdo, que según China es sólo el
principio de una mayor apertura económica entre ambas partes.