La empresa espacial Blue Origin LLC, respaldada por Jeff Bezos, está programada para lanzar su cohete New Glenn desde Cabo Cañaveral, Florida, este domingo, en una prueba crucial en su intento por desafiar a SpaceX.
El cohete, de unos 97,5 metros (320 pies) de altura, enviará dos naves espaciales fabricadas por Rocket Lab Corp. hacia Marte para estudiar cómo los vientos solares interactúan con la atmósfera del planeta. La misión, llamada Escapade (por Escape and Plasma Acceleration and Dynamics Explorers), es la primera misión del New Glenn para la NASA.
Pieza clave en los ambiciosos planes de Blue Origin para la exploración espacial, New Glenn lleva años de retraso y ha enfrentado un período de espera más largo de lo previsto, de unos nueve meses desde su primer vuelo.
El director ejecutivo de Blue Origin, Dave Limp, dijo en enero que la empresa buscaba realizar un segundo vuelo a fines de la primavera y un total de seis a ocho lanzamientos en 2025.
Un lanzamiento exitoso ahora podría volver a encaminar a Blue Origin en su objetivo de competir con el dominio que SpaceX, de Elon Musk, tiene sobre la industria de lanzamientos espaciales. El Falcon 9 de SpaceX es actualmente el vehículo de lanzamiento más activo del mundo.
Después del despegue, Blue Origin intentará aterrizar el propulsor del cohete en una barcaza en el océano Atlántico. El New Glenn, al igual que la serie Falcon de SpaceX, está diseñado para ser parcialmente reutilizable, lo que permite reutilizar los propulsores en múltiples lanzamientos.
Los pasos previos
El New Glenn realizó su vuelo inaugural en enero, cuando el cohete alcanzó la órbita, aunque falló el aterrizaje del propulsor.
Mientras que Blue Origin ya envía turistas al borde del espacio con cohetes más pequeños, New Glenn le daría la capacidad de llevar naves y satélites a órbita y más allá. Esto convierte al New Glenn en una pieza clave para ejecutar la cartera de contratos pendientes de la empresa, valorada en unos 10 mil millones de dólares.
La compañía también tiene un contrato con la NASA para llevar astronautas a la Luna en la misión Artemis V de la agencia.
El New Glenn forma parte de una nueva generación de cohetes, junto al Vulcan de United Launch Alliance y el Ariane 6 de la Agencia Espacial Europea, que han surgido como posibles competidores en la industria de lanzamientos, aunque han tenido dificultades para aumentar la frecuencia de sus vuelos orbitales.