Estados Unidos y Rusia acuerdan "sentar las bases" para poner fin a la guerra en Ucrania
Las primeras conversaciones de alto nivel sobre el conflicto desde los primeros meses de la invasión de Vladimir Putin marcan un cambio extraordinario, sin embargo, Kiev ha dicho que rechazará cualquier acuerdo que se le imponga sin su participación.

En la reunión en Riad, Arabia Saudita, la parte estadounidense fue liderada por el secretario de Estado, Marco Rubio, (al medio a la izquierda) y la rusa por el canciller, Serguéi Lavrov (primero a la derecha). Fotos: Reuters
La parte rusa, indicó que acordaron “garantizar la pronta designación de embajadores en sus respectivas capitales y eliminar los obstáculos impuestos por la administración Biden a las misiones diplomáticas rusas”.
“La realidad práctica es que habrá alguna discusión sobre territorio y habrá alguna discusión sobre garantías de seguridad, esos son simplemente conceptos básicos fundamentales”, agregó Waltz, señalando que Trump estaba “decidido a actuar muy rápidamente”.
Concesiones a Putin
“Quieren terminar con esto rápido, ambos. Y el presidente de Ucrania, (Volodimir Zelenski) también quiere ponerle fin”, dijo Trump el lunes.
El acercamiento entre Estados Unidos y Rusia ha generado temores en Kiev y en las capitales europeas de que Trump quiera resolver el conflicto en los términos de Moscú.
Washington parecía haber cedido a algunas de las demandas centrales de Putin incluso antes de que comenzaran las conversaciones de este martes, después de decir que las ambiciones de Ucrania de unirse a la OTAN y recuperar territorio actualmente ocupado por Rusia no eran "realistas".
Eso indicó que el Kremlin no había abandonado sus objetivos de conquistar grandes áreas de Ucrania y hacer prácticamente imposible que el país siga siendo un estado funcional. Rusia descartó un papel para Europa en las negociaciones y exigió que la OTAN rescindiera una invitación abierta de 2008 para que Kiev se uniera a la alianza.
Kiev ha dicho que rechazará cualquier acuerdo que se le imponga sin su participación, mientras que los países europeos han tenido que luchar para recuperar un lugar en la mesa. Mientras se desarrollaban las conversaciones del martes, Zelenski visitó a su homólogo turco, Recep Tayyip Erdoğan, quien anteriormente había intentado desempeñar un papel de mediador en el conflicto.
"Aquí nadie queda al margen"
Normalizar las relaciones bilaterales requeriría levantar las sanciones estadounidenses contra Rusia, que ha sido una de las principales demandas de Moscú. Rubio dijo que la UE “tendrá que estar en la mesa en algún momento porque también tienen sanciones (contra Rusia)”.
Cuando se le preguntó qué concesiones haría Moscú a cambio, el secretario de Estado estadounidense dijo que cualquier paso de ese tipo sería el resultado de una “diplomacia dura y difícil” en “salas cerradas durante un período de tiempo”. Agregó: “Aquí nadie queda al margen”.
Pero mientras Europa busca responder a las conversaciones entre Estados Unidos y Rusia, el presidente francés, Emmanuel Macron, está planeando una reunión de emergencia de líderes europeos este miércoles, la segunda en lo que va de la semana, según personas informadas sobre los planes.
La reunión está destinada en gran medida a los países que no fueron invitados a la cumbre anterior del lunes, cuando los líderes chocaron por el envío de fuerzas de paz a Ucrania. Mientras que el Reino Unido se ofreció a enviar “fuerzas sobre el terreno”, Alemania, Italia, Polonia y España expresaron su renuencia a hacerlo.
En la conferencia de seguridad de Munich del fin de semana pasado, los diplomáticos europeos se opusieron a la velocidad con la que la administración Trump se estaba moviendo para entablar conversaciones con Putin, y a la perspectiva de que el presidente ruso tuviera casi toda la influencia.