El Banco Nacional de Dinamarca anunció hoy la adquisición
del Roskilde Bank después de que éste se declarase insolvente y ante la
imposibilidad de encontrar un comprador privado para este consorcio bancario de
tamaño medio, en crisis desde hace meses.
El Roskilde Bank ya había recibido hace un mes un aval de
750 millones de coronas (algo más de 100 millones de euros) de las autoridades
financieras danesas, pero ayer tuvo que declararse insolvente tras descubrir
una auditoría externa unas pérdidas adicionales de 1.000 millones de coronas
(134 millones de euros).
La operación está cifrada en unos 37.300 millones (5.000
millones de euros), incluida la asunción de la deuda, si bien el Banco Nacional
ha anunciado que inyectará 4.800 millones (644 millones de euros) más para
garantizar la liquidez.
El presidente del Banco Nacional, Nils Bernstein, señaló hoy
en rueda de prensa que el colapso del Roskilde Bank constituía una
"amenaza grave" para la estabilidad financiera del país, ya que podía
"contagiar" a otros bancos.
Bernstein criticó además la "permisiva" cultura
crediticia del Roskilde Bank, que hoy suspendió de forma temporal la cotización
de sus acciones en la bolsa de Copenhague, como una de las causas principales
de su crisis.
El vicepresidente y ministro de Economía danés, Bendt
Bendtsen, respaldó la decisión del Banco Nacional para asegurar la
"estabilidad financiera" de Dinamarca en un momento de intranquilidad
en los mercados internacionales.
El actual director ejecutivo del Roskilde Bank, Søren Kaare
Andersen, seguirá en su puesto, aunque el banco cambiará de nombre y
permanecerá bajo control de las autoridades financieras hasta conseguir sanearlo
y encontrar luego un comprador privado.
El Roskilde Bank cuenta con 24 oficinas en Dinamarca, 32.000
accionistas, más de 100.000 clientes y 600 empleados.
La economía danesa entró oficialmente en recesión técnica
hace unas semanas al registrarse una caída del Producto Interno Bruto (PIB) en
dos trimestres consecutivos.