El dólar cayó este miércoles, por el débil reporte de nóminas privadas de septiembre y el primer cierre del gobierno desde fines de 2018 en Estados Unidos, noticias que presionaron negativamente al billete verde en casi todo el mundo emergente.
La paridad local bajó $ 2,63 hasta los $ 960,15 al cierre de la jornada, moderándose después de tocar un piso de $ 956 justo después de que se conocieron los datos de empleo estadounidense, según el registro de Bloomberg.
El dollar index retrocedía 0,1% y el rendimiento del Tesoro a dos años -sensible a lo que se espera de la Reserva Federal- caía 6,7 puntos base, mientras que el futuro de cobre subió 0,9% en la Bolsa de Metales de Londres.
Eso sí, por instantes el dólar-peso llegó a borrar totalmente su caída inicial. Y es que América Latina se vio desafiada: si bien la amplia mayoría de divisas emergentes se fortaleció, el peso argentino (-3,1%) sufrió en medio de las turbulencias políticas y económicas del país trasandino, y fue seguido por el peso mexicano (-0,3%) y el sol peruano (-0,2%).
Consecuencias del cierre
"El dólar global sigue a la baja a medida que el gobierno de EEUU cierra oficialmente y las nóminas de Automatic Data Processing (ADP) caen, llevando a la divisa a un mínimo semanal. La medida ha desestabilizado los mercados y podría retrasar los datos clave sobre el empleo del viernes, que son cruciales para la decisión de la Fed sobre las tasas de interés", escribió la analista de mercados de City Index, Fiona Cincotta.
Las nóminas privadas ADP fueron decepcionantes, ya que en septiembre se destruyeron 32 mil puestos de trabajo, mientras que en la estimación de consenso se esperaba la creación de 51 mil. No fue lo único: en agosto finalmente el saldo fue una reducción de 3 mil nóminas, una fuerte revisión desde los 54 mil que, según la lectura inicial, se habían incorporado.
"Si Trump concreta el despido de trabajadores y el cierre se prolonga, el mercado de tasas de interés buscará, como mínimo, reflejar en los precios una mayor probabilidad de recorte de tasa en octubre y diciembre, un escenario que aún no se ha reflejado plenamente en los precios y que probablemente pesará sobre el rendimiento del dólar global a corto plazo", escribió temprano el head de estudios para la región EMEA y activos internacionales en MUFG, Derek Halpenny.
De hecho, con las nuevas cifras laborales de por medio, los operadores están dando por hecho que habrá un recorte en octubre, y descuentan cerca de 90% de probabilidad de que también se rebaje en diciembre, según los precios de futuros y swaps.
Publicado a media mañana, el índice ISM manufacturero no trajo grandes sorpresas, y esto significa que registró siete meses consecutivos en zona de contracción (bajo los 50 puntos).
Las noticias estadounidenses mitigaron los efectos del débil Imacec de agosto sobre el tipo de cambio. El indicador sorprendió con un crecimiento de 0,5% interanual, menos de la mitad de lo previsto en las estimaciones de consenso.
Ayer martes el dólar-peso retrocedió, después de que cifras de confianza del consumidor y ofertas de empleo mantuvieran la narrativa de un enfriamiento del empleo estadounidense, sumando presión bajista global sobre las tasas norteamericanas y el billete verde.
La paridad local cayó $ 4,4 en septiembre, pero subió $ 31 en el tercer trimestre por un agresivo posicionamiento de agentes extranjeros contra el peso chileno.