Fueron diez meses de negociaciones que finalmente el lunes pasado se concretaron en un principio vinculante. Itaú pagará US$ 307 millones a Cencosud por el 51% de la propiedad de las sociedades administradoras de tarjetas del retailer en Chile y Argentina, rompiendo con esto un paradigma en cómo, hasta ahora, la industria del retail había manejado su negocio financiero.
Las nuevas regulaciones sin duda que marcaron la pauta en la incursión en este negocio, y a juicio del gerente general de Itaú Chile, Boris Buvinic, lo seguirán haciendo. “Es probable que hoy, producto de las nuevas normativas en discusión y porque esta transacción rompe un paradigma en el que los bancos competían con las casas comerciales, este modelo podría ser replicado (por otros retailers)”.
De hecho, el ejecutivo comenta que “las primeras reuniones fueron en septiembre de 2012. Dos años antes habíamos tenido una reunión en las oficinas de Cencosud donde fuimos a plantear nuestro interés en avanzar en una posible asociación, en general anticipando el escenario que se veía producto de las nuevas regulaciones. Anteriormente, habíamos señalado que producto del nuevo escenario regulatorio, como la Tasa Máxima Convencional y el Sernac Financiero, y también dada la experiencia que nosotros hemos tenido en Brasil, sentíamos que acá se iba a generar en algún minuto un replanteamiento sobre cómo se gestionaba el negocio del retail financiero, y eso generó un diálogo ya más oficial desde septiembre de 2012”.
- ¿Y en el análisis se consideró el fallo contra Cencosud, y el cambio normativo de la SBIF?
- En la negociación se ha internalizado los distintos eventos referidos al negocio, como también el irrestricto acatamiento a las normas y fallos recientes. Acá, el cliente de CAT (Cencosud Administradora de Tarjetas), no sufre ninguna modificación en sus contratos, pues el cliente tiene un contrato con CAT, que es lo que compramos.
- ¿Y los cambios del Banco Central y SBIF sobre supervisión del retail financiero?
- Las mayores exigencias que se imponen en la distintas normas en consulta, y en los proyectos de ley que están en el Congreso, indudablemente impactaron en el negocio del crédito. Sin embargo, el acuerdo que acabamos de firmar permitirá resolver esa situación, ya que la consolidación de la cartera y sus riesgos se radicará en el banco, que ya es supervisado por la SBIF.
- ¿Esperan replicar este modelo en otros países?
- La asociación sólo está referida a las operaciones en Chile y Argentina. El propio gerente general de Cencosud señaló que tiene un acuerdo vigente en Brasil con Bradesco, y en Colombia con Colpatria.
- ¿Pero ustedes podrían replicarlo fuera del país con otros retailers?
- Desde nuestro punto de vista, es tan relevante el trabajo que se viene en los próximos años, que el foco lo tendremos puesto en esta transacción. Tenemos un período de 90 días para firmar los contratos definitivos. Vamos a iniciar el proceso de due diligence durante las próximas semanas para llegar a la firma de los acuerdos en 90 días, y luego de eso recién iniciamos el proceso de tramitación de las aprobaciones ante los reguladores en Chile, Argentina y Brasil.
Las condiciones
- ¿Hay algún aspecto por el cual se podría caer este acuerdo?
- El acuerdo contempla las condiciones necesarias para la materialización de la asociación, con lo cual pensamos que la operación se va a concretar. Obviamente el regulador tiene la última palabra. Sin embargo, si uno analiza la discusión pública en torno a fortalecer el perímetro regulatorio de la SBIF, este es un quiebre de paradigma ya que hoy al consolidar CAT con el banco pasa a ser supervisado por la SBIF, y eso es un avance importante en relación al espíritu de lo que hoy se está discutiendo, como es el tema de la deuda consolidada. Ahora, hay un elemento central: esto tiene que consolidar en el banco, ése es el elemento más importante en este proceso.
- ¿Es decir que un eventual rechazo de los reguladores podría hacer que se cayera el negocio?
- Entendemos que están todos los elementos para ser aprobado. Además existen otros antecedentes de esquemas similares que hoy funcionan en Chile y que están aprobados por el regulador, y también en Brasil donde este es un modelo que opera hace muchos años.
EL perfil del banco
- ¿La administración de CAT no desperfila a Itaú en el ABC1?
- El banco mantiene su foco en el segmento ABC1. Nosotros estamos comprando el 51% de CAT, que es una compañía que pasaría a ser filial del banco bajo el esquema de sociedad de apoyo al giro (SAG). Por tanto no va a impactar a los actuales clientes del banco. El otro elemento, es que una vez que consolide con el banco, pasaremos a ser el principal emisor de tarjetas de crédito en Chile, con el 31% del mercado, y el 20% del mercado de créditos en tarjetas.
- ¿A los clientes de tarjetas les ofrecerán otros productos del banco?
- No, el acuerdo establece que nos vamos a focalizar en la gestión del negocio de tarjeta de créditos en la estructura actual de CAT. La alianza está referida al producto tarjeta de crédito. No está pensado entregar créditos hipotecarios, por ejemplo, aunque indudablemente intentaremos desarrollar todo lo que permitan las normas.
- ¿Pero esta sociedad de apoyo al giro podría derivar en una división de consumo?
- No, hoy el foco está centrado en una SAG con el fin de administrar el negocio de la tarjeta de crédito. No está pensado llevar el negocio hacia una división de consumo masivo.
Directorio y gestión
- ¿Cuál será el equipo a cargo del proceso?
- Hoy hay equipos multidisciplinarios trabajando en el due diligence, tanto en Chile como en Brasil, y también habrá auditores externos y equipos de Cencosud. Pero recalcaría que una vez que esté aprobada la transacción compraremos el 51% de una empresa en funcionamiento que opera muy bien, con lo cual pensar hoy en cambios es prematuro.
- Pero es lógico suponer que tendrán mayor control en riesgo y políticas de crédito...
- Llegado el minuto vamos a definir aquellas áreas sensibles que tienen que estar bajo el gobierno corporativo del banco, con los ejecutivos más idóneos, que pueden venir del actual equipo, pero siempre sujeto a la gobernanza del banco.
- ¿Y el directorio?
- Aún no está definido. Se tiene que establecer un pacto de gobernanza, el que claramente tendrá que tener subordinación a la estructura de gobierno corporativo de Itaú Chile para poder consolidar. Todavía queda una segunda etapa de discusión para ver quiénes serán los directores de esta compañía.