El diputado socialista Marco Enríquez-Ominami presentó hoy un plan de medidas económicas por US$4.800 millones que pondría en práctica en caso de llegar a la
Presidencia de la República.
El
plan de seis ejes implica un incremento del impuesto a las empresas a
30% y a productos como el tabaco y el alcohol. Además, en el royalty
minero, propone acortar tramos de aplicación sobre toneladas anuales
subiendo tope de 5% a 8%.
Además plantea una
reducción del impuesto máximo a la renta de las personas, desde 40% a
30%, la eliminación permanente del Impuesto de Timbre y Estampillas, la
reducción del impuesto a la bencina y el fin del IVA para libros y
artes escénicas.
Asimismo sugiere un alza de 10% en el
gasto público respecto a 2009, para aumentar las inversiones en Obras
Públicas, Viviendas Sociales y Salud.
En Educación, propone
recuperar los liceos de excelencia, perfeccionamiento de los profesores
en el exterior, contratación de docentes extranjeros, subsidios a la
educación municipal, premios de excelencia en educación universitaria y
reorientación estratégica del aporte fiscal indirecto.
En empleo el programa incluye la adaptabilidad laboral pactada, la
creación de un fondo de financiamiento para la competitividad, la
reorientación de los programas de empleo municipal, el incentivo a la
inversión en regiones, la agilización en la creación de nuevas
empresas, además de la flexibilidad de impuestos para empresas nuevas.
El
plan también considera una reforma al sistema previsional, que le
permita a todas las personas cotizar en el INP o en AFP y una exención
escalonada de pagos AFP e Isapres para el 30% más pobre de la
población.
Los lineamientos del programa fueron presentados
por el jefe de esta área en su campaña, el economista Paul Fontaine,
quien señaló que la propuesta es "bastante más completa, más concreta,
que la de las otras candidaturas", pues "define posturas específicas
para trabajar medidas económicas que impactarán directamente en
beneficio de todos los chilenos".