Industria

Mitsubishi se prepara para la caída del consumo y anticipa que normalización de la importación se dará fines de 2023

La marca incrementó un 43,5% las ventas en 2022 y tiene previsto mantener la cuota de mercado en torno a 4%, en un escenario de distribución donde se proyectan 335 mil unidades a diciembre del año que viene.

Por: Magdalena Espinosa | Publicado: Miércoles 19 de octubre de 2022 a las 13:20 hrs.
  • T+
  • T-
Ignacio Bengoechea, gerente general de Mitsubishi Motors. Foto: Julio Castro
Ignacio Bengoechea, gerente general de Mitsubishi Motors. Foto: Julio Castro

Compartir

La industria de importación de autos se está preparando para la caída de las ventas en 2023, luego de dos años récord sobre las 400 mil unidades. A esto se suma que pese a la sensación de que la pandemia está llegando a su fin, sus efectos seguirán impactando la cadena logística y la falta de componentes para construir nuevas versiones durante todo el próximo año.

Así lo reveló el gerente general de Mitsubishi Motors, Ignacio Bengoechea, quien en el marco de la conmemoración de los 25 años de la marca bajo el grupo Astara -ex SKBergé- en Chile, explicó que la escasez de microchips y semiconductores para la producción de automóviles seguirá siendo un dolor de cabeza para importadores hasta al menos diciembre de 2023.

A esta presión se suma que todavía “no hay barcos disponibles para traer autos. La fábrica cuenta un stock que estamos haciendo todo lo posible para importarlos a Chile porque aún hay clientes que esperan sus compras (...) La industria seguirá con problemas de inventario hasta fines de 2023”, explicó el representante de la marca. 

En este ejercicio, la fábrica de la compañía de origen japonés incrementó su producción para abastecer el auge de la demanda mundial. Sin embargo, la poca capacidad de las navieras hizo que se privilegien los mercados con grandes volúmenes de compra, en desmedro de países más lejanos como Chile que, aunque son muy competitivos internamente, la distancia desde los centros de construcción los hacen menos atractivos.

Freno de la demanda

Bengoechea contó que Mitsubishi recuperó gran parte de su participación de mercado en 2022, luego de la reposición de unidades. A septiembre de este período creció un 43,5% las ventas, versus el mismo período de 2021.

A sus ojos, el aumento de la cuota del mercado habría sido mayor si la marca hubiese contado con más unidades para distribuir.

“La meta de Mitsubishi en 2023 es continuar con una cuota en torno al 4% (16.000 unidades). Por el lado de las ventas de camionetas apostamos a mantener el liderazgo, pero la oportunidad de crecer es aumentar la distribución de otros productos como el SUV Outlander. Ante la falta de inventario no pudimos hacerlo antes, pero creemos que el próximo año el lanzamiento de nuevos modelos nos abrirán las puertas de nichos donde no participamos” expresó el ejecutivo. 

El representante de Mitsubishi adelantó que está mirando con mucho interés el aumento de las ventas de vehículos eléctricos y para 2023 el portafolio se ampliará hacia esa dirección.

Hace unas semanas, la Asociación Nacional Automotriz de Chile (Anac) declaró que habrá un ajuste de mercado para el próximo año, el cual caerá desde 420 mil unidades al cierre de 2022 a 335 mil ventas a diciembre del período que viene. Luego de conocer los pronósticos, el representante de Mitsubishi en Chile inició las conversaciones con la fábrica para ajustar el inventario sin perder la participación ganada durante el auge de la comercialización.

“Ya estamos haciendo todos los ajustes posibles porque la demanda viene cayendo. A esto se suma una segunda presión, que es el tipo de cambio sigue en torno a los $ 1.000 y eso genera que la gente posterga sus renovaciones de autos”, apuntó el alto ejecutivo. 

Un segundo frente que tuvo que enfrentar Mitsubishi es el aumento de los robos de camionetas durante marzo, lo que gatilló que las pólizas de seguros se dispararan. Bengoechea explicó que si bien, eso no frenó la compra de vehículos de su marca, se inició una campaña junto a las aseguradoras para poder instalar nuevos sistemas de prevención que consiste en instalar un "inmobilizador" para bloquear el motor del auto automáticamente. Esto funciona tanto para nuevas ventas, como para versiones antiguas.

Lo más leído