El
subsecretario del Tesoro estadounidense, Neal Wolin, consideró hoy que la
rapidez es crucial para resolver adecuadamente la crisis de deuda en Irlanda y
evitar un agravamiento de la situación en la zona del euro.
"Aprendimos
a lo largo de este año que es mejor lidiar con este tipo de asuntos con
rapidez", explicó Wolin en Bruselas, a donde se ha desplazado para
discutir la coordinación de la regulación financiera a ambos lados del
Atlántico.
El
subsecretario del Tesoro estadounidense también expresó su convicción de que la
Unión Europea y las autoridades de Irlanda, con las que se mantiene en
"estrecho contacto", lograrán superar sus dificultades, "pues
cuentan con la mezcla de herramientas adecuada para ello".
Una misión
"técnica" de las instituciones europeas y el Fondo Monetario
Internacional aterrizará hoy en Dublín para evaluar las necesidades financieras
de Irlanda y preparar un programa de ayuda, en caso de que las autoridades
irlandesas se decidan a solicitarlo, cosa que no ha sucedido por el momento.
En todo
caso, Wolin descartó que la crisis en Irlanda vaya a tener ningún efecto
colateral sobre la economía estadounidense.
"No
creo que esto vaya a tener ningún impacto significativo en la economía
estadounidense", dijo Wolin, que hoy abandona Bruselas tras entrevistarse
con el comisario europeo de Mercado Interior y Servicios Financieros, Michel
Barnier, encargado de la reforma financiera en la UE.
Wolin
garantizó que tanto la Unión Europea como Estados Unidos están trabajando para
coordinar los trabajos en este sentido y, aunque reconoció que "habrá
pequeñas diferencias" entre las distintas normativas a ambos lados del
Atlántico, aseguró que lo importante es "garantizar la igualdad de
condiciones para todos".