El presidente Hugo Chávez registró ayer su candidatura presidencial en Venezuela para la elección de octubre, y disipó las dudas de que no lo haría por el cáncer que lo afecta.
Chávez se inscribió luego que el domingo lo hiciera su joven rival, Henrique Capriles Radonski.
“No aspiro a ser el presidente de un grupo, sino de todos los venezolanos”, dijo Capriles, que dice querer unir una sociedad polarizada.
Aunque la campaña empieza oficialmente el 1 de julio, el registro permite a ambas partes hacer una demostración de fuerza, en medio de algunos sondeos que otorgan una ventaja de 20 puntos al mandatario y otros que apuntan a un empate técnico.
Chávez usó su registro para mostrar a los votantes que no está tan enfermo como sugieren insistentes rumores. Un periodista de EEUU recientemente citó a una fuente cercana al presidente según la cual el cáncer ha “entrado en su fase final”.
Sin embargo, el sábado Chávez dijo a la prensa que los exámenes hechos tras su radioterapia en Cuba salieron “absolutamente bien”. “Me siento muy bien”, dijo, a casi un año de anunciar que le habían extirpado un tumor canceroso de la pelvis.
Si su salud empeora, hay plazo hasta el 27 de septiembre para reemplazarlo.
Según la Constitución, de aquellos considerados los más probables sucesores de Chávez, sólo Diosdado Cabello, presidente del Congreso, podría competir en su lugar. Otros, como el canciller Nicolás Maduro, tendrían que haber renunciado ayer para hacerlo.
Capriles renunció la semana pasada como gobernador del estado de Miranda, donde venció a Cabello en 2008.