Los países miembros del G7 rechazan complementar, con
medidas similares, el paquete de ayuda estadounidense para paliar la crisis
financiera, según anunció hoy el ministro alemán de Finanzas, Peer Steinbrück.
Steinbrück hizo esa afirmación en Berlín tras celebrar una
ronda de consultas telefónicas con ministros de Finanzas y presidentes de los
bancos centrales de los países del G7, al que pertenecen Francia, Gran Bretaña,
Italia, Canadá, Japón y EEUU, además de la propia Alemania.
El ministro alemán dijo que la situación en los otros países
del G7 es distinta a la que hay en Estados Unidos por lo que en ninguna parte
se piensa en un programa similar al de Washington, que costará previsiblemente
al contribuyente estadounidense US$ 700.000 millones.
Steinbrück dijo, sin embargo, que el paquete de ayuda del
gobierno de Estados Unidos es un aporte importante para superar la crisis de
los mercados financieros y señaló que éste debe ponerse en práctica
rápidamente.
De manera indirecta, Steinbrück apeló a la Comisión Europea
a mostrar flexibilidad en sus controles, en caso de que algunos bancos europeos
afectados por la crisis tengan que recibir ayudas estatales.