En medio de la constante apreciación del peso chileno en relación con la divisa norteamericana, esta mañana el presidente del Banco Central, José de Gregorio señaló que el instituto emisor "no renuncia al uso de instrumentos de intervención cambiaria", previa evaluación del Consejo.
Si bien De Gregorio reconoció, en su presentación ante Asexma, que el dólar se ha depreciado internacionalmente, admitió que "en el último mes la apreciación nominal del peso chileno es mayor que otras monedas emergentes, desde una perspectiva más larga, es comparable a lo sucedido con otras monedas".
En ese sentido, puntualizó el titular del Central, que en términos reales, el tipo de cambio está en línea con sus fundamentos de largo plazo y "comparado con otras economías su evolución es más estable".
De ahí que sostuvo que la flotación cambiaria "facilita el ajuste a fluctuaciones de las condiciones financieras internacionales y sin duda evita agravar los efectos de éstas".
Y si bien detalló los beneficios de la flotación cambiaria, admitió también que ésta "admite intervención cambiaria en casos excepcionales, tal como lo hemos hecho en ocasiones anteriores".
Inflación
En materia de inflación, en tanto, el presidente del instituto emisor reiteró que para lograr mantener la inflación en 3% en un horizonte de dos años, "es necesario continuar con la normalización del significativo estímulo monetario actual.
Se reconoció además que "aunque existen riesgos en el escenario externo (...) también está el riesgo de que se produzca un dinamismo del gasto interno que se prolongue más allá de los deseado".
"El retiro del estímulo monetario es necesario para evitar que se incuben presiones inflacionarias que a posterior requieran de ajustes más rápidos y de mayor magnitud, con repercusiones en la actividad y los precios de los activos financieros", enfatizó De Gregorio.
Aunque deja abierta la ventana a que este retiro del estímulo "dependerá de la evolución de las condiciones macroeconómicas internas y externas".