Economía y Política
Le Fort: “No creo que el Banco Central deba dar por terminada la lucha contra la inflación”
“Tenemos que sentarnos a la mesa y conseguir acuerdos políticos efectivos” para financiar el mayor gasto social que requieren sectores como educación.
Por: Equipo DF
Publicado: Lunes 1 de agosto de 2011 a las 05:00 hrs.
Por Marta Sánchez Leiva
“Los mercados tienen problema de déficit atencional, le prestan atención a un tema y después se van a otro, pero luego vuelven”, señala el economista y ex gerente del Banco Central, Guillermo Le Fort.
Usa esta máxima para advertir que no porque Chile muestre altas tasas de crecimiento se debe mirar la situación externa como algo lejano. Por el contrario, asegura, “el escenario internacional hoy nos está afectando de varias maneras”, pero principalmente, con el tipo de cambio y la inflación.
- Con la particular situación que vive EEUU ahora, ¿existe alguna posibilidad de que la caída del tipo de cambio se frene?
- Espero que sí. Primero, la situación de tasas de interés internacional debería empezar a cambiar en la medida en que las políticas monetarias de EEUU consigan algo de tracción y empiece una recuperación del empleo y el Producto. Dos, que se generen mayores presiones inflacionarias efectivas y aumenten las expectativas en EEUU, lo que también ayuda a que se incrementen las tasas de interés y eso nos quitaría, eventualmente, la presión a la apreciación que hoy afecta al peso, pero eso no necesariamente va a empezar a pasar de forma inmediata todavía estamos pasando por momentos de dificultades.
- O sea, ¿podría llegar más abajo el tipo de cambio?
- Siempre es una posibilidad. Diría que no se pueden anticipar bajas mayores de las tasas de interés de EEUU, porque no pueden estar más bajas. Entonces, eso dificulta que se generen mayores diferenciales de tasas y que entren más capitales, lo que sí puede producirse es que existan más inversionistas interesados de entrar capitales hacia nuestras economías, en poner sus portafolios al riesgo chileno y eso puede significar poner alguna presión adicional al tipo de cambio, pero no creo que eso sea algo demasiado fundamental y distinto a lo que ya nos afecta.
- ¿Cómo evalúa la intervención del Banco Central?
- El Banco Central está interviniendo y no está pasando nada, porque este no es un mecanismo muy efectivo a la larga, ayuda a ganar tiempo durante algún período, genera una situación de liquidez y hace que el tipo de cambio aumente, pero ese incremento es completamente transitorio. Es una medida de efectividad temporal, bastante costosa, por lo tanto, ineficiente.
- Pero es la única que tiene por ahora...
- Hace tiempo decidió renunciar a las otras posibilidades cuando eliminó todo vestigio de utilización de controles de capitales, los cuales se usaron durante los años ´90.
- ¿Sería bueno retomar esta discusión dada la situación externa?
- La autoridad económica nunca debe renunciar a la utilización de distintos tipos de medidas. Pero creo que las posibilidades prácticas de utilizar controles de capitales en Chile están muy limitadas por las restricciones que impuso el TLC con EEUU y porque las instituciones que tendrían que administrar esas eventuales restricciones, carecen de equipos adecuados para hacer esa labor.
- ¿Cuáles?
- En el Banco Central esos equipos y facultades ya no existen. Ahora, la otra posibilidad sería a través del Servicio de Impuestos Internos (SII), debería ser dotado de facultades por ley para poder imponer el tipo de impuestos a la entrada de capitales que se utilizan, por ejemplo, en Brasil, Tailandia y Malasia, pero no tiene los sistemas de información para hacerlo. Pero si se hacen en otras partes, por qué no se pueden utilizar en Chile.
- ¿Por qué no?
- Porque están estas limitaciones prácticas antes conversadas y hay limitaciones de carácter ideológicos. Los controles de capitales incluso son aceptados por el Fondo Monetario Internacional, hay muchos analistas que dicen que son útiles, pero en Chile ha sido desechados y tratados de inservibles, lo cual corresponde más bien a sesgo en la mirada y no a una evaluación muy objetiva de la realidad.
Inflación en suspenso
Un segundo efecto, continúa, de la situación internacional tiene que ver con las presiones inflacionarias. Explica que en EEUU “hay una situación de inflación al alza y de un incremento latente”.
- Pero en Chile se lograron anclar las expectativas en torno a 4%...
- Lo fundamental que ha cambiado hoy -desde el desanclaje que hubo hasta hace poco- son los precios internacionales de los alimentos que estuvieron subiendo y generando presiones desde afuera, pero eso se ha revertido y eso nos ha suavizado la economía.
- ¿Y eso qué implica?
- Básicamente, la postergación de presiones inflacionarias que de alguna manera pueden surgir desde el lado doméstico. Hay razones para que en Chile pueda terminar por generarse una aceleración inflacionaria, no digo una cosa mayor, pero todavía el asunto inflacionario no está concluido.
- ¿Cómo cuáles?
- Todavía pueden haber mayores aceleraciones de salarios, la tasa de desempleo está muy baja, la economía está copando la utilización de su capacidad, el ritmo de crecimiento de la economía, aunque se está desacelerando, sigue siendo mayor al ritmo de expansión de la capacidad productiva, por lo tanto, elementos que van creando presiones se siguen acumulando. Por lo tanto, no creo que el Banco central deba dar la lucha contra la inflación por terminada.
- ¿Debe interrumpir la normalización de la Tasa de Política Monetaria?
- Todavía puede haber algunos ajustes más al alza, no en forma tan inmediata o tan rápida como venía haciéndolo, pero creo que es una situación que va a seguir teniendo que ser revisada.
- ¿Ya estamos en el nivel neutral?
- Estamos en el umbral de la neutralidad con expectativas de inflación superior a 3%, la tasa real que se genera es como de 2%, que es una tasa baja todavía, pero que podría empezar a estar cercana a la tasa neutral. Aunque si la reunión fuese mañana, con estos últimos antecedentes, creo que se postergaría nuevamente un alza de la tasa, pero sigo pensando que las tasas de interés llegarán a un 6%, es decir, que todavía quedan unas tres alzas más que puedan darse en el segundo semestre.
- ¿Existe la posibilidad hoy de que el Banco Central baje la tasa?
- No veo condiciones todavía para bajar la tasa, pero, eventualmente, esto podría darse, por ejemplo, si se declarara una crisis financiera en Europa.
- Dentro de este contexto, ¿cuál debería ser el aporte de la política fiscal?
- Es importante que la política fiscal continúe anclada en una visión de mediano y largo plazo y que se emplee la política fiscal con mucho cuidado y sabiduría para tratar de salirle al paso a problemas con fuertes incrementos de gasto. Creo que es importante continuar con esta política definida en función de los ingresos estrcuturales. Pero hay ciertas urgencias que es necesario atacar que es todo lo que tiene que ver con la reconstrucción, educación que pueden requierir gastos adicionales y que se deben encuadrar dentro del marco del presupeusto estructural.
- ¿Cómo calificaría una posible modificación de la meta de balance fiscal?
- Existen posibilidades siempre de modificar esa meta, pero lo que necesitamos es un acuerdo para que cualquier modificación que se haga sea realizada en el entendido que será de carácter transitorio para tratar algunos asuntos puntuales y que luego se regresará a la regla original. Creo que por razones país, de políticas de Estado se puede llegar a un acuerdo de gastar más para solucionar algunos problemas, pero por cierto período de tiempo, para volver despúes a las metas que aseguran la consistencia y la estabilidad de nuestra política fiscal en el tiempo.
- Por ejemplo, ¿una reforma tributaria para financiar gasto?
- Sí, creo que esa también es una discusión política importante y si lo que queremos hacer es incrementar permanentemente el gasto en algún sector, la generación de algún tipo de servicios o bienes públicos, lo que cabe es hacer una reforma tributaria e incrementar la tributación. Tenemos que sentarnos a la mesa y conseguir acuerdos políticos efectivos, no hay otra manera ni otro método.