El Informe de Percepciones de Negocios del Banco Central correspondiente a agosto arrojó que las empresas consultadas bajaron sus expectativas respecto al desempeño de sus negocios para el próximo año.
Según el documento, el consenso de los consultados es que el resto del 2016 no será muy distinto de lo observado hasta ahora, por lo que no esperan un deterioro de sus negocios respecto de la situación actual. Además, la mayoría de los entrevistados cree que esta estabilidad en el desempeño se extenderá al 2017. Ello, agrega, a diferencia del informe anterior donde algunos preveían una mejoría en el año entrante.
El informe del emisor añade que la mayor parte atribuye este cambio a la percepción de una incertidumbre económica y política más alta en el país, mencionando elementos como los efectos de las reformas y los procesos electorales.
En este contexto, la mayoría de los entrevistados señala que sus planes de inversión permanecen acotados, ajustándose a lo estrictamente necesario para mantener el funcionamiento de sus empresas.
Cambio en rubro inmobiliario
Sectorialmente, el mayor cambio en el estado de ánimo se da en los entrevistados ligados al rubro inmobiliario y de la construcción. Esto, porque aunque la mayoría esperaba una baja de las ventas tras el efecto positivo de los cambios tributarios, para algunos esta caída ha ido más allá de lo previsto.
Además, señalan que el mayor pie exigido por los bancos y, particularmente, la incertidumbre laboral podrían elevar el número de desistimiento de promesas de compra efectuadas el año pasado situación que genera especial preocupación. Con ello, el inicio de nuevos proyectos se ha revisado a la baja.
En cuanto al mercado laboral, la mayor parte de los consultados indica que, a diferencia de fines del 2015 y comienzos del 2016, en los últimos meses no se han realizado desvinculaciones de gran magnitud.
Condiciones financieras
En cuanto a las condiciones financieras, tanto las empresas como los bancos entrevistados resaltan la mayor restrictividad de la oferta, principalmente por la exigencia de mayores requisitos. La demanda de empresas y personas también ha disminuido.
El informe concluye que de hecho, la gran mayoría de los bancos resalta que no ha podido cumplir sus metas de colocación, incluso en casos en que estas habían sido revisadas a la baja. Con todo, los consultados cuyas empresas poseen una mejor situación financiera siguen con buen acceso al financiamiento.
En la vereda contraria, entre las empresas cuya situación financiera es menos holgada existe amplía molestia con la actuación de los bancos. Por otro lado, hay consenso en que más allá de los montos o requisitos, las tasas de interés siguen siendo favorables.